Alcalde pide 'perdón' por contratar personal afuerino
Alcalde pide 'perdón' por contratar personal afuerino

Prometer trabajo solo para los maranureños y no a nadie que fuera proveniente de otros lados se ha convertido en la soga que ayer apretò hasta la asfixia al alcalde de Maranura (La Convención - Cusco), Francisco Marcavillaca Alvarez, quien tomando fue acusado de contratar solamente a gente de afuera.

Marcavillaca, de quien se dice haber saltado de ser un gran contador de chistes de Plaza de Armas a un arrogante alcalde a quien dicen le encanta que le llamen "magister", sin embargo tuvo a su favor que la horda de unos 100 manifestantes solamente reclamaron el por qué no fueron contratados por el extraño título nobiliario de haber nacido en Maranura.

El ataque de chauvinismo era incontenible, y otra de las quejas de la protesta se originaba por haber contratado a músicos locales para que hagan la fiesta en todas las inauguraciones, además de dar serenata a la guapa esposa del diminuto alcalde, mientras que los músicos traídos de afuera ganaban muy bien, pero a sueldo de distinguidos operarios.

Los manifestantes denunciaron que las camionetas oficiales, pese a su poco recorrido de un distrito relativamente pequeño, consumías tanto combustible como un Aiir Bus A 300. También denunciaron con el parte policial en la mano, de que un vehÍculo oficial el 4 de julio se convirtió en una cantina rodante.

Marcavillaca, pese a su soberbia verbal en su respuesta a la turba, iba perdiendo las capas de poder, hasta que empezó a perder las capas de acero, y ceder a todas las demandas, casi sostenido como rodrigón por su asesorísima, Salizar.

El alcalde se queda solo, y sería un apestado en el partido Somos Perú de La Convención. Hoy estaría en la búsqueda de nuevos aliados, y estaría tocando las puertas a quien el mismo les cerró. Tal como en la novela de Gabriel García Marquez, esta Maranura sin Aurelianos Buendías, al parecer tampoco tiene Remedios, aunque otros `podrían burlarse diciendo que esta Remedios no podría ir al cielo ... por que pesa mucho.