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De repente, en Pampacolca, a 74 kilómetros de Aplao, capital de la provincia Castilla - , la quietud de un distrito agrícola y ganadero se interrumpió.

Más de 80 padres de estudiantes de la emblemática institución Juan Pablo Viscardo y Guzmán, plantel que tributa el origen del histórico precursor, se congregaron en la entrada del precario colegio. ¿La razón? La ausencia de tres profesores: de matemáticas, educación para el trabajo y ciencias sociales, a los cuales, se les otorgan cada dos meses licencias de trabajo, perjudicando al alumnado.

“Hoy no habrá clases, no permitiremos que alumnos entren”, dice una de las madres, quien trabaja en una de las catorce queserías del distrito. En la puerta, no hay ningún comunicado al respecto. Hay dos policías en la entrada. Incluso, media hora antes de la jornada, ocho profesores ingresaron, la mayoría sin conocer la razón de la suspensión.

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“No estaba enterado, firmaré en un acta mi ingreso”, dice raudamente un maestro auxiliar.

Minutos después, un grupo de diez alumnos y alumnas llegan en la movilidad que los trae desde Piscopampa, anexo ubicado a 10 kilómetros del plantel. Entre la sorpresa, alegría por el día libre, y tristeza por el sacrificio, lamentan la protesta.

“Hoy tenía un examen de inglés, no es justo, ahora seguro nos dirán para venir un sábado”, lamenta Manuel, de cuarto de secundaria. 

Tras una tensa espera, un grupo de nueve padres se reunieron con la directora de la institución, Gloria Chirinos, y con docentes que no acataron la protesta. Chirinos, quien recién este año tomó las riendas del plantel, presentó sus descargos, alegando que “agotó los esfuerzos administrativos al respecto”, y que “los profesores no quieren venir acá, por la distancia y baja remuneración”. “Eso es cierto”, dijo María Victoria Rodríguez, maestra de comunicación. “La directora no tiene la culpa -agrega-, la protesta debería ser en la Ugel de Castilla (Arequipa)”. Pero, por desgracia, el director se encuentra en Lima, desde el sábado.

En la improvisada asamblea, llegaron a unos acuerdos. Primero, que la paralización de labores será indefinida, hasta que una comisión de la Gerencia Regional de Educación Arequipa viaje hasta Pampacolca y tome cartas en el asunto. Punto que, según nos confirmó anoche el presidente de la Apafa, Dimas Aranzamendi, se concretó. “Vendrá el gerente (Jorge Choque Mamani), junto a una comisión. Deben llegar a las nueve, diez de la mañana”, dice. Por otro lado, los maestros aprovecharon para emitir un pronunciamiento, acerca de las condiciones de las lamentables condiciones de trabajo. Por último, directora, padres y docentes, demandarán la instalación de una mesa de diálogo.

Hoy, a pesar de la visita de los comisionados de educación, tampoco habrá clases. “Solo será hasta instalar la mesa de diálogo y tener los profesores completos”, aclara Aranzamendi.

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