Dos consorcios piden a Lima definir el futuro de un corredor

Aunque la Municipalidad de Lima mantiene las conversaciones con uno de los operadores del corredor Carretera Central, ello no sería suficiente para garantizar la continuidad del proyecto, advirtieron ayer los dos consorcios que fueron excluidos de las negociaciones.

Dicho eje vial necesita 360 buses para funcionar, pero la flota no podría ser adquirida por una sola empresa.

En este contexto, los consorcios Inka Bus y Central Vías, que ganaron licitaciones luego anuladas por Lima, pidieron ayer que Protransporte aclare cómo se cubrirá la demanda de viajes en esa ruta.

Versiones. Ambas empresas, que el próximo mes iniciarán un arbitraje a la comuna, solicitaron retomar el diálogo para lograr un acuerdo sobre la fecha de preoperación del corredor.

Héctor Vargas, presidente de Inka Bus, consideró que es “financieramente imposible” que una sola empresa compre todas las unidades requeridas. “En esa ruta debían operar tres consorcios, cada uno con 120 buses. Sin embargo, en marzo el municipio canceló los procesos de licitación en los que participamos dos operadores”, detalló.

Luis Caro, representante de Central Vías, indicó que ha solicitado que se extienda el periodo de negociación con Protransporte antes de iniciar el arbitraje, en el que pedirán que se reconozca la validez del concurso público que ganaron, además de una reparación económica.

Correo buscó la versión de Protransporte, pero no obtuvo una respuesta sobre cuál es el estado actual del corredor.