El Malecón Miranda, en total abandono

Pisco. Uno de los atractivos turísticos más visitados por los turistas nacionales y extranjeros, el Malecón Demetrio Miranda, se encuentra en total estado de abandono.
Este histórico malecón fue inaugurado en 1940 y lleva el nombre del ex alcalde y defensor de la patria Demetrio Miranda.
Desde algunos años este atractivo se convirtió en guarida para muchos delincuentes y asaltantes que robaban al paso a muchos turistas, ahuyentando a los visitantes.
A pesar que en reiteradas ocasiones los playinos exigían se haga algo para recuperar el malecón que era la mejor atracción de los años ?70, ?80 y ?90, no se ha hecho nada.
El 12 marzo de 2007, antes del terremoto, el alcalde Juan Mendoza recibió una carta con toda la reseña histórica sobre el malecón Demetrio Miranda y esta no fue atendida.
Quien se tomó la molestia de recopilar los datos fue Carlos Miranda Quiñones, bisnieto de Demetrio Miranda.
La carta mencionaba que "Pisco debería preocuparse más por el turismo, porque con el tiempo surgirán más hoteles en el sector de Paracas, el balneario que es visitado por muchos turistas, y es de saberse que primero tienen que pasar por Pisco, de hacerse estas reparaciones en el Malecón Miranda el comercio se incrementará".
Jamás se tomó en cuenta la documentación ni la historia que representaba este malecón, al contrario como ya se ha mencionado se dejó en total abandono y poco a poco se fue derrumbando, convirtiéndose en bar al paso y fumadero.
Desde el año 2000 hasta el 2006 todos los veranos este balneario de Pisco se aglomeraba, pero el encanto se fue perdiendo.
A esto se suma el muelle de madera, que cada día se fue cayendo a pedazos. Hace algunos meses se derrumbó la último parte del muelle y nadie hizo nada.
La población espera que el alcalde Jesús Echegaray Nieto tenga capacidad de gestión y se preocupe en realidad por el pueblo.
Si en caso llega a realizar la reconstrucción del malecón, que sea una buena obra y no cualquier cosa, como nos han tenido acostumbrado anteriores alcaldes que solo lo hacían por cumplir.

maycol herrera benavides
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