La fe en el amor, mueve montañas, dicen un viejo dicho popular. Este sentimiento, impulsó a un joven enamorado a sacrificarse, trasladando un pesado y gigante peluche para regalársela a su enamorada. La tamaña sorpresa que había preparado para su pareja, no permitió que sea opacada por el qué dirán de la gente en la calle y menos aún por un paro de los transportistas.

Justo en el paro. Al inicio, cuando Jonatan Rosas, emprendió la marcha desde una casa muy cercana al Terminal Terrestre le provocó un poco de rubor sacar del garaje a la calle el pesado oso. Lo tenía escondido hace más de dos semanas en la propia casa de su enamorada y con la complicidad de la cuñada. Al verlo, algunas chicas soltaban esos gritos característicos de emoción, chillidos que a veces ensordecen, halagos y risotadas que lo acompañarían a lo largo del trayecto.

Había llegado en la madrugada, procedente de la Lima, donde radica. Al enterarse que se cumplía un paro de 48 horas del Frente Único de Transportistas de Pasco (Futrap), realizados los días 28 y 29 de mayo, pensó que eso ya se había solucionado . Entonces, salió normal de la cochera, entre la envidia de las chicas que querían sentirse honradas con ese obsequio, deseándole que a la vuelta de la esquina encuentre un medio de transporte. Pero como todos sabemos el paro fue total y no había servicio de transporte.

La esperada cita. Durante esas horas del paro, todos se movilizaron en la línea once, es decir a pie, cargando en forma ingeniosa sus pertenencias, ni los tricicleros salieron a ofrecer transporte. Y como tenía programado entregar el obsequio en el centro de trabajo de su enamorada, Marisol Betancourt, en el distrito de Yanacancha, a Jonatan Rosas, no le quedó otra que seguir caminando sudoroso en el candente sol.

Correo, avistó al enamorado a la altura del barrio Matadería, cuando precisamente descansaba y contestaba el teléfono a su impaciente enamorada, que lo esperaba para un romántico almuerzo en un restaurante de San Juan. Con la curiosidad del periodista, le preguntamos por quién se esforzaba de tal manera o quién era la afortunada con tan pomposo peluche. 'Si me ayudas te cuento todo', respondió. Incluso nos ofreció alquilar la bicicleta en el que nos trasladábamos. ¿Es para tu enamorada?, insistimos; no, es para la trampa, contestó irónico. Le tomamos algunas fotos y nos animamos a ayudarlo, ya que le faltaba más de la mitad del camino por recorrer y estaba muy cansado. Obviamente, la bicicleta quedó chica al lado del oso.

Cuando llegó a San Juan, Marisol, había cambiado de restaurante, porque su amado hombre se demoró mucho, debió cargar algunos paso más. En la puerta del local, todos los comensales voltearon y miraron sorprendidos el inesperado regalo.

Altura. El mal de altura o soroche, es el principal obstáculo para los visitantes de otras ciudades a Cerro de Pasco, que está localizada a más de 4 mil 380 msnm.

Ayudamos a trasladar el peluche en la bicicleta el cumpleaños de la novia

La fecha especial para este enamorado, que no solo causó revuelo entre las chicas, sino también admiración entre los varones, en el que algunos de ellos le gritaban héroe, fue el 23 cumpleaños de su novia. Quiso dejarle presente de su inmenso amor, no solo en palabras, sino con un tremendo peluche, y lo más importante, el sacrificio que realizó, cargándolo desde el Centro a San Juan, además de padecer los rigores del soroche.

Transportistas. El día de la prueba de amor, el Futrap, paralizó completamente la ciudad y no había ningún tipo de servicio de transporte.

Marisol, sorprendida con el regalo de Jonatan, pero se sintió feliz