Horas de pánico en Piura por presunto artefacto explosivo

Momentos de tensión y pánico vivieron los transeúntes y propietarios de las tiendas comerciales, por la alerta de un presunto artefacto explosivo en una camioneta estacionada en la calle Arequipa.

La noticia movilizó a las unidades de Serenazgo, Comisaría de Piura, Radio Patrulla, Divincri y la UDEX cuyos agentes se encargaron de sacar y hacer detonar el presunto explosivo.

Sin embargo, en horas de la tarde fuentes allegadas a la Divincri informaron que los especialistas de UDEX descartaron que se tratara de un artefacto explosivo.

ALERTA. Ayer a las 11:20 de la mañana, la camioneta roja marca Mitsubishi de placa P2K-930 se estacionó bruscamente en la calle Arequipa frente al centro comercial El Rosal. La propietaria y conductora Elizabeth León Ruiz entró en crisis nerviosa al detectar un artefacto extraño en una de las gabetas del vehículo, por lo que su acompañante dio aviso a la central de SECOM.

La Unidad Paramédica de Serenazgo auxilió a la propietaria y dio aviso a la UDEX que se hizo cargo del operativo de desactivación.

TENSIÓN. Por seguridad y para evitar la intromisión de los transeúntes la policía acordonó la cuadran de las calles Ica-Arequipa-Callao y solicitó a los propietarios de los negocios ubicados en la zona a desalojar su locales.

La tensión sobre el presunto explosivo se prolongó hasta las 12.30 del día en que los agentes de UDEX sacaron el artefacto del vehículo y lo dejaron en la pista. Luego colocaron unas llantas viejas para cubrir el presunto artefacto explosivo y lo hicieron detonar a las 12:49 del día y la vía fue despejada a la 1:15 de la tarde.

FALSA ALARMA. En busca de una versión oficial de la policía, Correo acudió a la Divincri donde fuentes allegadas informaron que según el informe presentado por la UDEX no se trataba de ninguna bomba u otro tipo de artefacto explosivo.

En realidad se trataba de un circuito eléctrico improvisado a base de control de remoto, precintado y adaptado a tres pilas. Sin embargo, la UDEX siguiendo el protocolo para casos sospechosos hicieron detonar el aparato.

Refieren que si se hubieran tratado de un explosivo la detonación hubiera sido más fuerte y habría causado algunos daños.