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Los tratantes no paran. Dos adolescentes de 16 y 17 años fueron captadas por una juliaqueña que vino desde Puno para ofrecerles trabajo en una discoteca por jugosos sueldos de 1500 y 1700 soles.
Maritza Yaranga Navarro (25) fue intervenida por los policías de la comisaría de Huancayo cuando conversaba con las muchachas que declararon ante la División contra la Trata de Personas, que la fémina iba a pagar los pasajes y el hospedaje en la ciudad altiplánica.
El operativo se realizó al promediar las 9:30 horas a inmediaciones del mercado Modelo, donde a diario acuden muchas jovencitas en busca de un trabajo. La intervenida no quiso declarar nada a la Policía, solo dijo que tiene 5 meses de embarazo y pedía un abogado.
sufren. Las menores lloraron de miedo, ya que recién habían llegado Huancavelica y buscaban trabajo, porque sus padres son pobres y se han desentendido de ellas.
La Policía lamentó que muchos padres de familia no se encarguen del cuidado de sus hijos, que son presas fáciles de los tratantes de personas.
En esta oportunidad las niñas se salvaron. Ahora la Policía las mantendrá en custodia hasta que aparezcan sus padres, que deben acercarse a la dependencia de Millotingo.
