Limeños sufren por prolongado corte de agua

La imprevista prolongación del corte de agua en 14 distritos de Lima y Callao por más de 48 horas, debido a la reubicación de una tubería situada en donde se construye el by-pass de 28 de Julio, provocó ayer angustia y malestar en cientos de ciudadanos, quienes padecieron para conseguir el líquido elemento.

El malestar de los vecinos de las jurisdicciones afectadas comenzó el martes a las 9 de la mañana. A esa hora estaba prevista la reposición del servicio, que había sido suspendido durante 24 horas; sin embargo, esto nunca ocurrió.

El ingeniero Fernando Piscoya, de Sedapal, informó que el corte se extendería por más horas debido a que la empresa contratada por la concesionaria OAS, encargada de la construcción de la obra, tuvo inconvenientes técnicos al realizar este trabajo.

La empresa estatal estimó que la demora sería por unas horas, pero llegada la noche señalaron que volvería el agua en la madrugada de ayer.

El anuncio se cumplió a medias, pues en San Miguel, Jesús María, Magdalena, Cercado de Lima y Breña el recurso no llegó, lo que provocó una situación crítica.

Problemas. Para algunas familias de Breña y Jesús María, la búsqueda del líquido vital comenzó a temprana horas. Con baldes, ollas, botellas y pequeños recipientes, las amas de casa esperaban en fila a que camiones cisternas de Sedapal puedan proveerles de agua para asearse, lavar y cocinar.

“Juntamos agua solo para un día, no para tres, por lo que no tenemos para asearnos y cocinar, es una situación muy difícil”, comentó Sonia Cangalla, vecina de la cuadra 9 del avenida General Garzón, en Jesús María.

La medida también afectó a diferentes locales comerciales así como colegios. Varios restaurantes y lavanderías no abrieron durante dos días debido a la falta de agua, mientras que los salones de belleza y otros negocios no pudieron ofrecer todos sus servicios.

En tanto, el colegio María Auxiliadora, en Breña, suspendió las clases debido al desabastecimiento de agua.

En cambio, en el colegio Diego Ferré, de Jesús María, las autoridades lograron llenar varios baldes y compraron agua embotellada.

Al cierre de esta edición, la falta de agua continuaba en varias zonas de la ciudad.

Pérdidas

Los dueños de los comercios afectados por la falta de agua perdieron entres 300 y 500 soles cada día que no brindaron atención al público.