Lurín: Desborde de aguas servidas afecta casas y fábricas
Lurín: Desborde de aguas servidas afecta casas y fábricas

La noche del último jueves, a la altura del kilómetro 40 de la Panamericana Sur, en , cientos de pobladores veían impotentes como fábricas, negocios y viviendas eran arrasadas por el desborde de las aguas residuales de la planta de tratamiento de Nuevo Lurín, ubicada en un terreno en disputa entre la asociación Sumac Pacha y el Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Lima (Sedapal).

Ambas se acusan de ser responsables del desborde aguas servidas que ayer cubrieron de especies muertas y mal olor a la zona adyacente a la playa Arica.

Enfrentados. Antonio Angulo, gerente de Asuntos Legales y Regulación de Sedapal, señaló que este acto es responsabilidad de los pobladores de Sumac Pacha.

“Sedapal tomó todas las medidas preventivas para que esto no ocurra. Si sucedió es porque la gente de esa asociación, dirigida por Diosdado Navarro, ha repletado con tierra parte de una de las lagunas de oxidación, originando su desborde”, señaló el funcionario. Precisó que esa acción la realizaron para amedrentar a la empresa estatal, porque han denunciado el hecho en los medios.

“Hace dos días nos enviaron una carta notarial, dándonos 15 días de plazo para vaciar el agua de las lagunas y lo que ellos han hecho es adelantarse”, enfatizó Angulo.

Sin embargo, Diosdado Navarro, presidente de Sumac Pacha, negó que hayan colapsado la laguna. “Sedapal es responsable por su negligencia al no cumplir el mandato judicial que les prohíbe verter agua residual porque iba a rebalsar su capacidad. Han seguido bombeando y rebasó el agua, afectando las viviendas de la asociación”, enfatizó el dirigente.

“No estamos prohibiendo el ingreso a Sedapal, solo acatamos una medida cautelar que les prohíbe operar las lagunas”, acotó Navarro.

El pasado 23 de setiembre, Sumac Pacha obtuvo una medida cautelar de la Primera Sala Civil de la Corte Superior, que impide a Sedapal entrar a la planta.

Malestar. Quienes padecen las consecuencias de esta disputa son los vecinos de Sumac Pacha y Lurín, quienes no sólo tienen que drenar el agua que inundó sus casas, soportar el mal olor y ser víctimas de posibles infecciones a la salud; sino también vivir con el temor de que una situación similar se repita, debido a que la planta de tratamiento de aguas residuales no está siendo operada por Sedapal.

“No solo existe ingreso de agua a las casas, también ha dañado nuestros muebles y artefactos, ¿quién nos asegura que esto no volverá a pasar?, se preguntó una vecina que vive en el cruce de las avenidas Separadora e Industrial, lugar donde la mitad de un carril de la pista se hundió debido a la humedad .

Ubicada en una zona industrial, el mayor daño lo recibió la fábrica Vainsa, por donde el agua residual de la laguna encontró su punto de escape, inundando maquinaria y mercadería. “No nos preocupa tanto las pérdidas materiales, sino empezar a operar cuanto antes con normalidad”, dijo Carlo Camaioro, gerente general de Vainsa, quien no descartó demandar al responsable, una vez concluyan las investigaciones.

CIFRAS

36 fábricas están ubicadas en la zona industrial de Lurín, cerca a las lagunas.

4 lagunas conforman la planta de tratamiento de Nuevo Lurín.

DATO

Sanción: ANA inicia proceso a Sedapal

La Autoridad Nacional del Agua (ANA) ha iniciado el monitoreo de la playa Arica como medida de verificación de la afectación por las aguas servidas.

Desde la apertura de un canal de desfogue que hizo Sedapal, la playa Arica ha recibido más de 15.840 m3 de aguas sin tratar, el equivalente a seis piscinas olímpicas. Sedapal insiste que el arrojo del desagüe al mar guarda relación con la toma de la planta de tratamiento de Nuevo Lurín.

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