Recuerde que no es aconsejable que compare sus notas con las de sus hermanos o amigos, ya que hará que se sienta culpable e incluso incapaz de mejorar.
Recuerde que no es aconsejable que compare sus notas con las de sus hermanos o amigos, ya que hará que se sienta culpable e incluso incapaz de mejorar.

Para muchos padres, la situación de que su hijo desapruebe un curso les genera ansiedad, preocupación y sienten que han fracasado en la supervisión de su enseñanza. Sin embargo, para Javier Arroyo especialista en educación online de Smartick,  estos procesos forman parte de un aprendizaje y mucho más aún cuando los alumnos han tenido que adaptarse a una nueva educación: lo virtual. Pero ¿cómo ayudarlo a que suba sus promedios para el próximo año?

El experto menciona que primero, el tutor debe entender las dificultades que ha persuadido al escolar a que baje sus calificaciones o las desapruebe. “Es importante que entable una conversación, sin gritos o insultos. Que el estudiante hable si no se llevó bien con la profesora, los cursos le parecieron difíciles, sufrió de bullying o simplemente no se adaptó a lo digital”, explica .De igual forma, como padres deben analizar si se trata de malos resultados o de fracaso escolar, ya que no es lo mismo. Por ejemplo, el fracaso escolar puede ser causado por varios motivos: un trastorno de aprendizaje, un trastorno emocional, una capacidad intelectual inferior  o causas circunstanciales (cambios de colegio, separaciones o divorcios de los padres o incluso fallecimientos).

PADRES HELICÓPTERO

Arroyo detalla, que los padres que buscan ser sobreprotectores y demasiado controladores con los niños, tampoco estarían ayudando a su desenvolvimiento. “Les hacen sus tareas para que los estudiantes saquen buenas notas y a la hora de dar sus exámenes no rinden. Hay que dejar que la equivocación no los frustre y sigan aprendiendo porque cuando empiecen acudir a las escuelas presencialmente van a querer que sus padres los acompañen y esto retrasa su aprendizaje”, indica.

CONSEJOS

El experto exhorta  a que ahora que vienen las vacaciones, los niños puedan motivarse con nuevas actividades que involucran el aprendizaje en las matemáticas, la historia y la comunicación. Sin embargo, que este aprendizaje no se realice más de dos horas al día para que el niño o adolescente no se aburra. “Se les puede matricular en juegos lúdicos, retos online y otros cursos presenciales”, concluye.