Ante cientos de visitantes, más de 200 actores en escena, le dieron vida al tradicional Pagapu Wanka que se llevó a cabo en el santuario de Wariwillka en Huari.
La ceremonia estuvo presidida por el sacerdote huanca o laya, quien rodeado de un séquito de sacerdotisas ofrenda el maíz, la chicha de jora a la pachamama, como una forma de pedirle que bendiga con la lluvia para tener una buena cosecha
En un manantial allí ubicado, el curaca, su esposa y los nobles guerreros se bañaron, según el escritor Ramiro Matos Mendieta, este manatial tine poderes curativos y cuando una pareja bebe de ella se asegura la fidelidad.