Abandonados. Así se encuentran dos de los lugares más representativos de la región de Ayacucho, a nivel nacional e incluso internacional.

Se trata del Obelisco y la Pampa de Ayacucho, los cuales se encuentran abandonados por las autoridades, responsables del desarrollo de las actividades turísticas a nivel regional.

El Frente de Defensa del Distrito de Quinua, hizo esta denuncia a través de su presidente, Santiago Nolasco Orellana, quien dijo que estos lugares no reciben el tratamiento que por su calidad histórica se merece.

"La Pampa de Ayacucho, es un Santuario Histórico Nacional, ese merecimiento se le otorgó en 1980. A través de ahí, las autoridades locales debieron velar por su mantenimiento, lo cual no fue cumplido al 100%, al igual que el obelisco", advirtió.

HECHOS. Según la denuncia, la Pampa de Ayacucho, estaría siendo utilizada como botadero de algunos visitantes, que llevan comida, refrescos, entre otros productos, cuyos residuos los dejan tirados en la misma pampa, perjudicando su imagen como escenario histórico de la Batalla de Ayacucho, que selló la independencia de América Latina.

En el caso del Obelisco, denunció que de manera urgente requiere mantenimiento, ya que las constantes lluvias y el pasar de los años, provocaron daños a estructura, que representa la independencia Latinoamericana.

ARTESANÍA. Referente al rubro artesanal, el Frente de Defensa, señaló que existe un apoyo por parte de las autoridades locales en el tema del fortalecimiento de capacidades productivas, que permitirá mejorar la elaboración de sus productos que luego serán ofrecidos en los diferentes mercados locales, regionales y nacionales.

Sin embargo, al igual que los monumentos históricos, aún falta mucho por mejorar, antes de hablar de un atractivo turístico artesanal a gran escala como en otras ciudades del país.

"No creemos que exista satisfacción por parte de nuestros hermanos artesanos de Quinua, ya que las autoridades siempre se olvidan de algo y ese algo retrasa su desarrollo", señaló.

Igual situación ocurre en la ciudad de Huamanga, con monumentos históricos como el arco de la Alameda Valdelirios, y el Arco del Triunfo.