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El ingeniero Gustavo Flores Flores, expresidente de la Comisión de Energía y Minas del Congreso de la República y miembro del Frente Cívico por Puno, se mostró optimista ante el acuerdo energético Perú-Bolivia, que incluye la importación del balón de gas envasado de Gas Licuado de Petróleo (GLP), al sur peruano, a bajo precio. Sin embargo llamó a ser vigilantes.
Primero que es una muy buena noticia, pero hay que estar vigilantes, para nosotros que se importe el GLP boliviano al mismo precio que se vende en el Perú, simplemente no vale la pena, tiene que ser mucho menos, refirió el especialista en temas de hidrocarburos.
Para Flores, la importación del GLP se hace realidad luego de que en el 2002, el Colegio de Ingenieros de Puno planteó por primera vez, la importación del Gas Natural a Puno por la cercanía; en ese entonces de Bolivia aún no producía GLP y contrariamente el Perú exportaba GLP a Bolivia. Muchas cosas cambiaron desde entonces.
Bolivia construyó dos plantas separadoras de líquido y la última es la Planta de Gran Chaco ubicado en el departamento de Tarija, planta que le garantizará la exportación del GLP tanto a Perú y Paraguay. Finalmente, tras el acuerdo energético, por el que a manera de prueba Bolivia abastecerá de 10 mil balones de gas al sur, y cuya base del gasocentro será Juliaca, se han tejido muchas dudas sobre todo el relación al precio.
Para Gustavo Flores, en la negociación del costo del GLP, primará como base el precio internacional. Por ello duda que el precio del gas sea menos de 20 soles. Nadie tiene una bola de cristal, pero tampoco creo que sea 20 soles. El gas tiene menos que el precio peruano, pero tenemos que estar atentos a la negociación.
camisea. Plantea también que el Gobierno peruano debería priorizar la construcción del Gasoducto Sur Peruano y la construcción de la planta separadora de líquidos de Camisea, para luego distribuir el gas que posee el Perú en Cusco, con que se dejaría de depender de la importación del GLP.
