Policía incursiona en la casa de "negra Maritza"

En medio de una lluvia de piedras, balas y bombas lacrimógenas, agentes de la División de Investigación Criminal (Divincri) incursionaron en la vivienda de una presunta microcomercializadora de droga conocida como la "negra Maritza", incautando marihuana, cocaína, balas, dinero y hasta una granada de guerra. Un policía resultó herido por uno de los proyectiles.

Uno de los objetivos era atrapar a la dueña de la casa, sin embargo, cuando los agentes ingresaron, ésta ya no se encontraba dentro. Al parecer huyó segundos antes al percatarse de la intervención.

Fue mediante un trabajo de estudio y seguimiento que los agentes utilizaron para llegar a la casa de Maritza Soledad Farfán Castro, ubicada en la cuadra cuatro de la calle Buenos Aires, a pocas cuadras del cementerio Virgen del Carmen.

INGRESO. Los agentes intervinieron al mediodía de ayer y, de inmediato, recorrieron los ambientes de la vivienda de dos pisos. En uno de los dormitorios hallaron la droga y en otras áreas, las balas y la granada de guerra, así como más de 300 soles en monedas de un sol y un rollo de bolsas plásticas similares a las que contienen la cocaína y los "pacos" de marihuana.

Dentro de la casa se encontraban dos jóvenes, quienes serían familiares de Maritza Farfán, los cuales fueron trasladados a la Divincri junto con varios artefactos electrodomésticos.

BALAS Y BOMBAS. Cuando los agentes policiales, apoyados por los serenos, salían de la vivienda, una turba de sujetos comenzó a arrojarles piedras, motivando que los custodios lanzaran bombas lacrimógenas e hicieran varios disparos al aire, tratando de disuadir a los agresores. Los defensores de la "negra Maritza" son, presuntamente, consumidores y gente de mal vivir.

Dentro de la casa hallaron 97 "ketes" de cocaína, una bolsa plástica y un envoltorio de papel conteniendo varios gramos también de cocaína; tres bolsas plásticas conteniendo "pacos" de marihuana; 23 balas de armas de largo alcance; una botella plástica con los más de 300 soles en monedas; y varios gramos de marihuana envueltos en papel de bolsa de azúcar.

POR VARIOS FRENTES. Sujetos atacaron con una lluvia de piedras.

Cuando repelía el ataque, uno de los efectivos fue herido en la mano derecha por uno de los proyectiles lanzados por la turba. El agente resultó con un profundo corte que le produjo un profuso sangrado. Felizmente no tuvo consecuencias mayores.