Luego de cuatro horas de intervención, la Policía Nacional del Perú ha tomado el control de los alrededores del Mercado La Parada, declarada zona rígida, para colocar los bloques de concreto en las vías de acceso a este centros de abastos. La intervención policial dejó dos muertos, 21 heridos y decenas de detenidos.
En la avenida San Pablo se presentó la mayor resistencia contra las fuerzas del orden, pero tras una hora de intervención con bombas lacrimógenas, la policía dispersó a los vándalos que eran apoyados por los vecinos de la zona.
La operación se inició al promediar las 11:00 de la mañana cuando un fuerte contingente policial se apostó en la zona y pidió a los comerciantes ambulantes que desalojen el lugar sin embargo, un grupo de vándalos intentó impedir el avance de los tanques y los policías por la avenida Aviación.
Por la estación Gamarra del Tren Eléctrico, que tuvo que suspender su servicio de paradero en este lugar, la policía realizó varias detenciones e incluso tuvo que emplear los gases lacrimógenos.
La intención de los vándalos era impedir que lleguen al centro de abastos, sin embargo la fuerte presencia policial, cerca de cinco mil, los hizo retroceder hasta que los efectivos del orden pudieron llegar y rodear el Mercado La Parada.
Al abrirse por momentos una de las puertas del centro de abastos, en donde se encuentran algunos camiones que han descargado sus productos y comerciantes, se pensó de un ingreso, pero minutos después ello fue desmentido por el propio director general de PNP, Raúl Zalazar.
El oficial confirmó que la operación policial se realiza para garantizar la colocación de los bloques de concreto y se cuenta con la presencia de 45 fiscales en el lugar.