Los sistemas sanitarios del sector Salud de la región Cusco se encuentran reforzados para responder adecuadamente y que no haya hospitalizados ni personas muertas por coronavirus, señalaron recientemente desde la Geresa Cusco.
“La Covid-19 es una enfermedad más de las que tenemos que vigilar. Ya no podemos hablar de rebrotes u olas porque ya no estamos en epidemia”, enfatizó el gerente regional de Salud, Ernesto Choquehuayta, al tiempo de precisar que los casos que están registrándose a nivel regional son los esperados estacionalmente de manera normal. “Nuevos casos siempre aparecerán de acuerdo a cambios climáticos, a la temporalidad, el frío”, acotó.
Por su parte, Alex Jaramillo, director de Epidemiología de la Gerencia Regional de Salud, dijo que las vacunas han demostrado no solamente una alta eficacia y mucha efectividad, sino ser los mejores aliados en la intervención sanitaria de salud. “Actualmente, la Geresa y el Ministerio de Salud tienen la dotación de vacunas necesarias para poder atender a la demanda de la población”, remarcó.
Jaramillo Corrales, indicó que a la fecha, están aplicándose vacunas bivalentes y vacunas monovalentes. “Cualquiera de las dos son eficaces, seguras, tienen buena calidad y una cobertura adecuada para las variantes que se están presentando ahora en el país”, aseveró.
VACUNAS VENCIDAS
Respecto a referidas vacunas vencidas del Minsa, el especialista demandó a la población tratar y entender adecuadamente este tema. “Las vacunas no son como los alimentos. Las vacunas precisamente tienen una fecha de vencimiento, pero posterior a ella se hacen pruebas de seguridad y eficacia, por tanto, puede hacerse la extensión de su uso”, precisó.
El director de Epidemiología refirió que, si las vacunas cumplen las condiciones necesarias y registran las efectividades necesarias, pueden seguir aplicándose durante seis a 12 meses. “Eso es lo que ha pasado con el Ministerio de Salud, las vacunas tienen una extensión de uso por otros seis meses, estamos hablando de junio de 2024″, afirmó.
Sostuvo, además, la necesidad de que la población continúe vacunándose, principalmente la ciudadanía de la tercera edad, así como con comorbilidad a fin de limitar los casos severos y la mortalidad.