Se viene la plaga...
Se viene la plaga...

Silenciosos y letales, como diminutos asesinos caminan en los pasillos del Hospital Regional Manuel Núñez Butrón desde que las tuberías de agua y desagüe colapsaran hace un año, debido a la antigüedad del nosocomio. Desde entonces y hasta la fecha no se ha aplicado ninguna solución desinfectante de alto nivel para descontaminarlo.
Mientras continúa la huelga indefinida de los trabajadores de Salud, que hasta la fecha ha cobrado algunas muertes, una potencial amenaza asoma en los corredores y pasillos del Hospital Regional de Puno, debido al alarmante abandono en que se encuentra. Basta con recorrer los ambientes hospitalarios para comprobar el nivel de suciedad y hacinamiento en que se encuentra dicho nosocomio que brinda servicios para alrededor de 1 millón 300 mil pacientes, población que excede su capacidad real que fue para 200 mil. Según un informe del Departamento de Patología Clínica, varios de sus ambientes, así como parte de su mobiliario, están contaminados con bacterias patógenas.
La contaminación comenzó en mayo del 2007, al colapsar las tuberías de desagüe interno. En esa oportunidad, las aguas servidas alcanzaron hasta 15 cm de alto desde el suelo y discurrieron por pasillos y habitaciones de la unidad de cuidados intensivos (UCI), ubicada en el primer piso del hospital en donde se encuentran también los ambientes de cirugía y operaciones.
Jorge López Tejada, presidente de la Federación Médica Peruana, en la región Puno, aseguró que desde esa fecha no se han aplicado normas de bioseguridad destinadas a reducir riesgos de transmisión de microorganismos que causan infecciones. Ni mucho menos se ha hecho un seguimiento del problema.
"Hemos comunicado a Defensa Civil, Gobierno Regional y hasta a la Fiscalía, todos han hecho sus apuntes correspondientes y tienen conocimiento del tema, pero hasta la fecha no han hecho nada".
Según López Tejada, la contaminación habría afectado a tres pacientes que permanecieron internados algunos días en el hospital. Solo se confirmó que uno de ellos, José Antonio Ticona Monroy, presentó una queja al respecto, aunque no se pudo conocer detalles acerca de esta.

Ambientes plagados de bacterias. De acuerdo con un informe elaborado por la Oficina de Patología Clínica, los servicios contaminados son los de cirugía general y especializada, la UCI, la sala de operaciones, los ambientes de las especialidades de pediatría, neonatología y nutrición, así como el centro obstétrico, el consultorio externo y la farmacia.
Ese documento indica también que se tomaron muestras a los pisos de todos los ambientes antes señalados, así como a las mesas de curaciones, el mesón de la sala de partos, mesas de repostería y tópico, coches de curaciones, mesas para preparar alimentos y las de comer para los pacientes, entre otros objetos.
Luego de practicarse un cultivo de las muestras tomadas, se hallaron diversos gérmenes como las bacterias 'Escherichia coli' (E. coli) y 'Staphylococcus epidermis' o 'Saprofyticus' u 'Enterobacter spp'.