Tradicional boda de bomberos en Cusco concita la atención de locales y turistas (Galería de Fotos)

Claudia Castillo y Gustavo Pereira son dos bomberos que se conocieron en la Compañía N°39 de Cusco, él había cursado sus estudios bomberiles en ese cuartel y ella pidió su transferencia de otro... "todo fue como planeado", cuentan en su noche de bodas... "nos conocimos, enamoramos y ahora nos casamos, y todo gracias al cuerpo de bomberos, que nos unió y ahora nos acoge como esposos", citaron la noche del pasado sábado en la puerta de la iglesia de San Francisco en el cercado de Cusco, donde contrajeron nupcias y pasaron al vistoso paseo en la máquina de agua de la Cía 39.

La potente sirena del vehículo y los vistosos adornos que colgaban de la caseta, escaleras y mangas llamaban la atención de propios y extraños. Turistas y locales felicitaban a la pareja al verlos pasar en el carro de bomberos. "Siempre es lindo ver a los bomberos, ellos se sacrifican mucho y es mejor aún cuando ves que se casan", citó una vecina del centro.

Es una tradición dentro de los bomberos que una escolta vaya a recoger a la novia a su casa y otra al novio, así se hizo y los mejores amigos de Gustavo dentro de su unidad lo acompañaron a él y su novia en todo momento, portando sables y hachas, que se entrelazan para hacer un camino para los recién casados.

Esta denominada "Guardia de Honor" es la misma que se encarga de llevar a los novios hasta el lugar de la fiesta, que es este caso fue el salón de honor del cuartel 39. En el lugar los bomberos cantan una antigua canción de celebración mientras los novios beben de un pitón de manguera, una bota o algún vaso grande, una vez que se termina el brindis los bomberos arrojan los vasos al piso al son del estribillo... "de esta copa nadie más ha de beber".

Acto seguido los bomberos se reúnen y cargan a los novios y los lanzan al aire tres veces a modo de darles suerte, luego viene la felicitación de los efectivos más antiguos hasta los más nuevos y la fiesta empieza en el cuartel de bomberos.