Mañana se cumplen dos meses desde que Alejandro Soto Reyes fue electo presidente del Congreso. Desde entonces, el legislador electo por Alianza para el Progreso (APP) no ha tenido más que una serie de cuestionamientos en su contra.
El más reciente tiene que ver con un presunto blindaje a su favor de parte de la Universidad Nacional San Antonio Abad del Cusco (UNSAAC), casa de estudios con la que obtuvo sus grados académicos de posgrado y que informó que iniciaría una investigación por una serie de irregularidades en las tesis del parlamentario.
Sin embargo, José Béjar, decano de la Facultad de Derecho de la UNSAAC, denunció que hasta el momento dicho proceso no ha empezado.
Como se recuerda, un informe periodístico evidenció que la tesis de doctorado del parlamentario tiene un 67% de similitud con otros textos, según el software académico antiplagios Turnitin. Además, se reveló que utilizó para misma tesis para obtener el grado de maestría y doctorado.
DENUNCIA
“No hay ninguna investigación. Yo tengo conocimiento de que no hay ninguna comisión. El señor rector (Eleazar Crucinta) ha manifestado que el Consejo Universitario (hará la investigación). Por lo tanto, él no ha nombrado ninguna comisión, no hay nada concreto, solamente es una mera o simple declaración”, afirmó el decano Béjar.
En diálogo con RPP, precisó que él es parte del Consejo Universitario de la UNSAAC, sin embargo, hasta el momento no hay ninguna denuncia de parte sobre el caso de Alejandro Soto, hecho que calificó de “preocupante”.
En consecuencia, el 11 de setiembre, Béjar presentó un documento en la Oficina del Órgano de Control Institucional (OCI) de la mencionada casa de estudios bajo el asunto “denuncia graves irregularidades en la obtención de los grados académicos de magíster y doctor en derecho conferidos al señor Alejandro Soto por la escuela de posgrado”.
“Repito, no hay ninguna otra denuncia. Es la primera denuncia material objetivo que estoy haciendo para que se investigue y que OCI se pronuncie al respecto”, indicó.
Cabe precisar que Béjar relató que luego de presentar la denuncia, Soto Reyes “de manera amenazante y con cierto abuso de autoridad”, solicitó que la UNSAAC le entregue sus grados académicos.
“Es una actitud de represalia. Entiendo que está acostumbrado a estas cosas, no va a asustarme”, dijo.
El decano agregó que tiene todos los grados académicos, esto además de que sus trabajos están publicados.
Desde su punto de vista, lo que sucede con el caso del titular del Parlamento sí afecta la imagen de la universidad.
Por otro lado, consultado sobre quién tendría la responsabilidad de los hechos irregulares para que Soto obtenga sus grados académicos, respondió que no solo sería el apepista, sino también personal de la universidad.
“Como todos sabemos en el canal donde trabajaba el señor Soto, hay gente de ese canal que trabaja en la universidad. Entonces, imagino que han utilizado mecanismos de ese tipo para presionar a ciertas autoridades para cometer estos actos irregulares, es lo que tengo conocimiento. Parece que trabajan en relaciones públicas”, agregó.
ARGUMENTOS
Pero, ¿cuáles son los argumentos para presentar una denuncia contra Alejandro Soto? De acuerdo con el documento que cursó el decano Béjar a la OCI, se detectaron cuatro presuntas irregularidades -académicas y administrativas- en los estudios de posgrado (ver infografía).
La primera irregularidad en la que habría incurrido la UNSAAC es en la convalidación de 13 cursos que Soto aprobó en la Universidad del País Vasco en España en 2017.
Esto debido a que la Ley Universitaria no permite dicha convalidación, así como el reglamento académico de la UNSAAC, ya que solo los alumnos que estudian en el Perú pueden hacer ese procedimiento de convalidación de homologación.
“Quienes estudian en una universidad extranjera deberán hacer uso del procedimiento de Revalida, conforme dispone el artículo 59.9 de la actual Ley Universitaria, lo que el denunciado ha omitido festinando los trámites y ha efectuado la convalidación”, se lee en el documento.
Agregan que después efectuó el “traslado internacional”, un procedimiento que tampoco está regulado por la normatividad universitaria vigente.
El segundo hecho irregular es que Soto cursó sus estudios para optar el grado de doctor solamente en un año, cuando el artículo 45 de la Ley Universitaria establece que se requiere de estudios con una duración mínima de seis semestres académicos o de tres años.
El tercer aspecto está relacionado a las denuncias periodísticas que han evidenciado que el presidente del Congreso utilizó el mismo trabajo académico para optar el grado de magíster y doctor en derecho.
“Utilizando prácticamente el mismo título de la tesis, el mismo contenido y casi la misma extensión como se puede verificar de la simple lectura de las copias de ambos trabajos”, señala la denuncia.
Finalmente, en la denuncia se informa que lo más grave es que los dos trabajos no son originales ni auténticos, sino que son plagios de otros autores.
Para ello, la investigación para obtener el grado de magíster pasó por el sistema antiplagio Turnitin, que obtuvo como resultado el 66% de plagio, “lo que constituye un hecho de carácter delictivo”.
Precisan que el hecho de plagio se repite en la tesis doctoral que presentó Soto.
“Por lo que, en salvaguarda de los intereses de la institución universitaria, al igual que de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas a mi cargo, solicito a la Jefatura de la OCI que disponga la investigación del presente caso para la ulterior sanción del denunciado y de quienes resulten responsables de estos hechos”, concluye el documento.
Según el decano Béjar, se llegó a los cuatro puntos antes mencionados gracias a una investigación preliminar que hizo, todo con documentación para sustentar el caso.
“Como funcionario público tengo la obligación de denunciar estas irregularidades (en la Escuela de Posgrado), una de estas es sobre el señor Soto Reyes, quien ha optado los grados académicos magíster como también de doctor de manera totalmente irregular”, precisó.
Si bien prefirió no adelantar una opinión sobre si los grados de Soto Reyes deben ser retirados, consideró que una vez que concluya la investigación se podrá tomar una decisión objetiva.
El 11 de setiembre, Correo conversó con Eleazar Crucinta, decano de la UNSAAC, para conocer el procedimiento sobre la investigación de los grados académicos de Alejandro Soto.
La autoridad explicó que el caso sería trasladado a la Escuela de Posgrado, para que ellos hagan llegar la investigación y que esta se haga pública para los medios de comunicación.
Posteriormente, el caso pasaría a manos del Consejo Universitario, grupo que podría ordenar el retiro de los grados académicos del apepista.
Este medio se puso en contacto nuevamente con Crucinta a fin de conocer los motivos por los que la UNSAAC todavía no ha iniciado una investigación de parte, pero al cierre de esta edición no obtuvimos respuesta.
Por su parte, el presidente del Congreso tampoco publicó ningún comunicado en respuesta a la denuncia de represalias que habría iniciado hacia la autoridad académica que lo denunció. Sin embargo, se espera que hoy viaje a Cusco para iniciar su semana de representación, lugar en el que podría declarar a la prensa.