Chilenos escogen Tacna para hacer proselitismo político

Para nadie es un secreto que la Ciudad de Tacna es un mercado atractivo para los chilenos, no solo por los bajos costos en que pueden encontrar atención médica, sino por la variedad de productos que pueden adquirir a un precio menos que el que pagarían en su país de origen.

Sin embargo, lo que nunca antes se había visto es que políticos chilenos crucen la frontera para realizar en territorio peruano sus campañas proselitistas.

CAMPAÑA

Al mediodía del sábado, la ciudadana chilena Mónica Azocar, quien es candidata a un escaño en el concejo de la Municipalidad de Arica, llegó hasta la Alameda Bolognesi acompañada de dos de sus compatriotas y comenzó a entregar calendarios promocionales a cuanto chileno se le pusiera en frente.

Azocar es candidata por el partido político "Por el Progreso de Arica (ProArica)" e indicó que el motivo inicial de la visita era visitar las ferias gastronómicas que se realizan por estas fechas en la ciudad, en las cuales se esperaba contar con presencia de electores chilenos, empero, al conocer que las ferias no estaban siendo concurridas por sus compatriotas, prefirió quedarse cerca a los locales comerciales que se ubican en la avenida Bolognesi, donde sí encontró una gran cantidad de chilenos.

VOLVERÍA

Si bien es cierto Mónica Azocar llegó en esta oportunidad con un grupo reducido de acompañantes y solo se limitó a entregar calendarios que, dicho sea de paso, fueron fabricados en Tacna, no descarta una nueva visita, que cause mayor impacto entre los chilenos que de manera diaria visitan la ciudad.

INICIATIVA

Pero Azocar no es la primera que cree que la ciudad de Tacna es un buen mercado para conseguir el apoyo del electorado chileno.

Desde hace algunos meses, un panel del candidato Andrés Peralta, quien también candidatea para un puesto de concejal, se encuentra ubicado en el óvalo de ingreso a Tacna, muy cerca al aeropuerto.

TURISTAS

Al parecer los políticos chilenos optan por venir hasta esta ciudad teniendo en cuenta la gran cantidad de extranjeros del vecino país que llegan diariamente para diversos fines.

Aunque esta práctica es poco usual, no se conoce de ninguna norma o ley que prohíba a los extranjeros realizar proselitismo político fuera de su territorio, siempre y cuando este no atente contra la seguridad nacional.