Miguel Ángel Rodríguez Mackay: Con salida de Rousseff vendrá tiempo de oxigenación en Brasil
Miguel Ángel Rodríguez Mackay: Con salida de Rousseff vendrá tiempo de oxigenación en Brasil

El internacionalista Miguel Ángel Rodríguez Mackay analizó la frágil situación política en Brasil y el inminiente juicio político a la mandataria de ese país, Dilma Rousseff.

“Dilma Rousseff intentó maquillar un déficit de Brasil que estaban revelando forados importantes. Empezó a tocar algunos bancos y obteniendo ese dinero empezó a crear una cuenta ficticia y los engaños han sido delatados, y por eso la puntería de la oposición está en este flanco débil que ha mostrado la presidenta y que ella ha querido relativizar y diciendo que todo esto consuma para ella un acto de venganza de Eduardo Cunha, el defenestrado presidente de la Cámara de Diputados”, declaró a Correo a las 6.

“Si se aprueba (el impeachment), desde mañana la presidenta será notificada por el presidente del Senado y ella inmediatamente se convierte en una presidenta suspendida, no deja de ser presidenta, pero no puede ejercer el cargo e inmediatamente el vicepresidente, y ahora su enemigo político, Michel Temer asume el cargo por no más de 180 días. Al final de ese lapso habrá una nueva votación para decidir si la presidenta es destituida o no, si lo es entonces Michel Temer dejará de ser presidente interino y se convertirá en el presidente de Brasil, si no lo es, sino se alcanza los ⅔ de la votación, ella retomará su cargo”, agregó.

Rodríguez Mackay afirmó que a estas alturas ya está casi consumado el impeachment contra la mandataria brasileña y afirmó que como presidenta suspendida no hay ningún recurso al que pueda hacer uso para defender su inocencia.

“Ninguna instancia política nacional o internacional puede interferir un proceso político que no es presidido por un político o un senador sino por el presidente del Tribunal Supremo Federal de Brasil”, dijo.

“Si Michel Temer es objeto de un proceso de impeachment y al final de ello es también destituido tendrá que haber elecciones si esto es antes del mes de diciembre del 2016, si acaso es en enero, febrero o marzo del 2017 ya no habrá elecciones generales sino que tendrá que elegirse dentro de los miembros del Senado y de la Cámara de diputados al nuevo presidente de Brasil”, declaró.

El internacionalista aseveró que una posible salida de Rousseff le hará bien a Brasil ya que ayudará en estos tiempos que vive el gigante sudamericano. “Creo que con la salida de Dilma Rousseff vendrá un tiempo de oxigenación que suele pasar cuando viene una dinámica de cambio”.

“En pocos meses se inician los Juegos Olímpicos, la gran pregunta es, ¿quién será la personificación del poder en Brasil?”, sentenció.

TAGS RELACIONADOS