La campesina de Cajarmarca Máxima Acuña, de 47 años, ganó el premio Goldman, considerado como el "Nobel Verde". La agricultora recibirá este lunes en San Francisco (EE.UU) el prestigioso galardón, entregado a las personas que han destacado por su lucha ambientalista a nivel mundial.
En 2015, la indígena hondureña Berta Cáceres fue premiada por defender la naturaleza ante la construcción de una represa.
En el caso de Acuña, ella defiende ni más ni menos que su propia casa ubicada en la vecindad de la Laguna Azul en Cajamarca para que la empresa Newmont Mining Corporation pueda culminar de ejecutar el proyecto minero Conga, valorizado en más de 4 mil millones de dólares.
“Yo compré ese terreno en 1994 para vivir firme con toda mi familia todos los días de mi vida al borde de la Laguna Azul”. Pero el ‘felices para siempre’ no ocurrió.
En 2011, llegaron a su hogar asegurando que el terreno donde vivía ya no le pertenecía, sino que era de la empresa minera. En los alrededores está la mina de Yanacocha, considerada la mina de oro más grande de Latinoamérica.
Entonces, ante su negativa le han ofrecido comprarle muchas veces la propiedad, pero ella se niega, porque cree que al dejar su hogar, deja la riqueza natural de la zona en manos de quienes no van a protegerla sino destrozarla.
“Por la lucha, por la defensa que yo estoy resistiendo, han dejado un poco normal y tranquila la laguna. Porque si no, si yo ya hubiera dejado de luchar, ya ellos tendrían esa agua contaminada o ya no habría agua para nada”, dijo.
Por vía judicial, Acuña demostró en segunda instancia que compró el territorio en 1994, sin embargo la empresa sostiene que está usurpando el terreno que esta última adquirió en 1996.