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José Miguel Castro, exgerente municipal durante la gestión edilicia de , recibió un millón de dólares en efectivo para la campaña por el “No” a la revocatoria.

Así lo reveló el propio  exrepresentante de  en el Perú, quien precisó que el exfuncionario edil pidió un financiamiento de $3 millones para la publicidad de la campaña en dicha consulta popular, desarrollada en marzo del 2013.

Fuentes de Correo, presentes en la diligencia de ayer en Brasil, relataron que Barata también refirió que los otros $2 millones se entregaron en reales (la moneda brasileña) a los publicistas Luis Favre y Valdemir Garreta, quienes trabajaron en la campaña para evitar que Villarán deje el cargo casi un año antes del fin de su periodo, lo que se consiguió.

Pese a que las preguntas relativas a la investigación a la exalcaldesa estaban programadas para hoy, el exdirectivo brasileño adelantó parte de esta información y ayer dijo que Castro -cuyo codinombre es “Budian” en la planilla de la Caja 2- se quejaba por la demora de los pagos prometidos por la constructora.

HOY DETALLA MÁS

Precisamente, hoy el exrepresentante de Odebrechet en el Perú, Jorge Barata, brinda en estos momentos su testimonio respecto a los aportes que la constructora brasileña habría realizado a favor de la campaña contra la revocatoria de Susana Villarán, Además, incluirá en su testimonio los aportes de Odebrecht a la campaña por la reelección de Villarán. Y es que el tema de los aportes a Villarán será tratado con mayor detalle hoy.

ALTERNATIVA

Sin embargo, en la víspera Barata narró que surgió la idea de abrir una cuenta en la Banca Privada d’Andorra, con el nombre de Gabriel Prado para tal fin, exgerente de Seguridad Ciudadana de Susana Villarán y también expresidente de la Empresa Municipal Administradora de Peajes (Emape), la que no se llegó a utilizar.

Sobre este último exfuncionario, Barata no aclara si sabía del pago de $3 millones. Sin embargo, señala que hubo una reunión entre Prado, Castro y Andrés Sanguinetti, el hermano del expresidente uruguayo Julio María Sanguinetti y sindicado como el contacto de Odebrecht en Andorra.

“Yo no sé si le explicaron a Prado si era para algo de la campaña, pero la gente de la Banca Privada d’Andorra sabía que eran pagos indebidos”, manifestó Barata según nuestras fuentes.

Prado salió de la comuna en enero del 2013 y alegó que ese año -cuando le pidió ayuda a Castro para encontrar un nuevo trabajo- firmó un documento en blanco en una reunión para tal fin. Su defensa afirma que con ese papel abrieron la cuenta en Andorra.