Úrsula Letona: Mi voto sobre el TC será de conciencia y no por consigna alguna

La congresista de Fuerza Popular, Úrsula Letona, negó haber participado en algún tipo de "arreglo bajo la mesa" para llevar a cabo la elección de nuevos miembros del Tribunal Constitucional (TC) tras la difusión de unos audios que protagoniza junto a Rosa Bartra, Miguel Torres y Javier Velásquez Quesquén.

"Rechazo tajantemente toda práctica de grabación ilegal, venga de donde venga, y no solo cuando afecta a determinado sector político. Reitero también que mi voto será de conciencia y no por consigna alguna", escribió la congresista en su cuenta de Twitter.

Úrsula Letona respondió así a la difusión de una grabación en la que ella habla con los legisladores arriba mencionados en noviembre del 2018. En aquel momento, hablan de la importancia de instalar la comisión especial para proceder a la elección de nuevos magistrados del TC.

"El solo hecho que se instale la comisión ya al Tribunal le bajas una llanta", se le oye decir a Javier Velásquez Quesquén a los otros participantes del diálogo.

"Quiero dejar muy claro que nunca he participado de ningún arreglo bajo la mesa y menos para la elección de miembros del TC. Los congresistas conversamos permanentemente temas políticos y esto no puede suponer una componenda", señaló Letona al comentar el audio que fue difundido por "Cuarto Poder" el 22 de setiembre.

La congresista concluyó señalando que siempre ha defendido que la elección de los nuevos miembros del TC no puede darse "en función a situaciones particulares".

Actualmente, en el Congreso hay una polémica por la programación de la sesión del pleno del 30 de setiembre, en la cual se dará inicio al debate sobre los once nombres de los candidatos propuestos por la comisión especial para nombrar a los reemplazantes de seis miembros del TC.

El proceso se lleva a cabo mientras el tribunal tiene pendiente pronunciarse sobre un hábeas corpus presentado para anular la prisión preventiva contra Keiko Fujimori, además de las especulaciones de una cuestión de confianza que podría plantear el Gobierno en caso se rechace el proyecto de adelanto de elecciones para el 2020.