Científicos británicos identificaron 15 nuevos puntos del ADN cuya mutación aumenta el riesgo de padecer cáncer de mama.
Según un estudio publicado por la revista "Nature Genetics", la investigación eleva a 90 la cantidad de "hot-spots" (puntos calientes) del ADN humano en los que la variación del código genético está ligada al desarrollo de la enfermedad.
Se analizó material genético de más de 120 mil mujeres descendientes de europeos, algunas de las cuales padecieron cáncer de mama y otras no. Todo esto permitió identificar 15 nuevos polimorfismos de nucleótido simple (SNP, en inglés) -variaciones de una sola base del ADN-, que disparan el riesgo de sufrir ese tipo de cáncer.
El profesor de la Universidad de Cambridge, Doug Easton, quien lideró la investigación, afirmó que su descubrimiento "es un nuevo paso adelante para desentrañar el puzzle del cáncer de pecho".
"Aporta información sobre cómo y por qué el riesgo de padecerlo se puede heredar. Los marcadores genéticos que encontramos nos pueden ayudar a tomar medidas preventivas en las mujeres que más lo necesitan", señaló Easton.