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Con los dos accidentes de vuelos comerciales al espacio en los últimos diez días aún frescos en la memoria, la  esta lista para lanzar el 4 de diciembre la primera misión no tripulada de la cápsula Orión, que un día podría llevar humanos a.

Orión, construida por el grupo aeroespacial Lockheed Martin, no tendrá tripulantes cuando parta desde Cabo Cañaveral en Florida (sureste de EEUU), pero esta prueba involucrará equipo y hardware para cohetes por más de 370 millones de dólares.

Ese valor no incluye el costo de la construcción de la cápsula multipropósito Orión, cuya forma recuerda el Apollo que conquistó la Luna en 1969.

La misión de prueba, conocida como EFT-1, está programada para el 4 de diciembre a las 07H05 (12H05 GMT) desde la plataforma de lanzamiento del Centro Espacial Kennedy de la NASA, y se espera que concluya cuando el aparato caiga en el océano Pacífico unas cuatro horas y media después.

"Este es el realmente el primer paso de nuestro viaje a Marte", dijo William Hill, gerente adjunto de los sistemas de exploración de la NASA, en una rueda de prensa. El "EFT-1 es absolutamente la mayor cosa que esta agencia está haciendo este año", destacó.

El vuelo de prueba comienza con el despegue del cohete pesado United Launch Alliance Delta IV (ULA), que será el octavo lanzamiento de este sistema particular de lanzadera.

El aparato será impulsado por dos cohetes aceleradores con 301.000 kilogramos de potencia cada uno, explicó el director de la misión ULA, Ron Fortson.

Estas unidades son más poderosas que las desarrolladas para los transbordadores espaciales que utilizaba la NASA hasta que jubiló sus naves 2011.

El cohete no comparte ninguno de los componentes que estuvieron involucrados en la explosión el 28 de octubre del cohete Antares, de la empresa Orbital Sciences, poco después de su lanzamiento, en lo que se suponía que iba a ser una misión de suministro para la  (ISS).

La explosión costó a Orbital más de 200 millones de dólares, pero por fortuna no hubo víctimas mortales.

Tres días después, un accidente fatal de la nave para turismo SpaceShipTwo, de la empresa Virgin Galactic, causó la muerte de sus dos pilotos.

"En el negocio espacial somos una gran familia y cuando alguien fracasa todos lo sentimos", expresó Hill.

Sin embargo, el director del programa Orion, Mark Geyer, aseguró que los accidentes no generan una preocupación particular en su equipo ante el lanzamiento que se avecina.

Los accidentes "sólo nos recuerdan los riesgos que ya conocemos", señaló a reporteros.