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Francia inició ayer un bombardeo contra diversos objetivos del Estado Islámico (EI) en la ciudad siria de Raqqa, la capital de la organización terrorista responsable de los ataques del viernes en París.
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La respuesta ocurre a dos días de la matanza de civiles perpetrada en la capital francesa que dejó cifras terribles: 129 muertos y más de 300 heridos en actos criminales reconocidos con jactancia por voceros del EI.
El presidente Francois Hollande y el primer ministro Manuel Valls anunciaron el último sábado una respuesta poderosa. Hollande afirmó que su país “no se deja impresionar por lo sucedido” y que Francia “no tendrá piedad” con los terroristas.
CAZABOMBADEROS. Del dicho al hecho, Francia lanzó una ofensiva aérea masiva contra posiciones del EI en la ciudad siria de Raqqa, anunció el Ministerio de Defensa francés.
Los ataques, coordinados con Estados Unidos, han sido realizados simultáneamente desde el territorio de Jordania y de Emiratos Árabes Unidos, según la agencia Reuters.
Un comunicado del Ministerio de Defensa francés, citado por la agencia RIA Novosti, precisa que el primer objetivo eliminado durante esta serie de ataques ha sido un punto de mando del EI que se utilizaba también como centro de reclutamiento y depósito de armas y municiones.
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Fueron movilizados una docena de jets de combate.
“El otro objetivo ha sido un campo de entrenamiento de los muyahidines”, detalla.
Al día siguiente de los ataques en París, el primer ministro Manuel Valls anunció que el contraataque de Francia se situará “al mismo nivel” que los atentados terroristas del viernes.
El jefe de Gobierno señaló a la cadena francesa de televisión TF1 que su país “está en guerra” contra el terrorismo y que por lo tanto responderá “golpe a golpe para destruir al Estado Islámico y a ese ejército terrorista”.
Los bombardeos del domingo en realidad son el reinicio de las operaciones francesas contra el EI, pero esta vez con carácter masivo, según las agencias noticiosas.
La Fuerza Aérea de Francia realizó su primer ataque contra posiciones del grupo terrorista en Siria el pasado 27 de setiembre.
En las próximas horas, sin duda, se conocerán detalles de los resultados del contraataque francés.
CIVILES EN PÁNICO. En otro ámbito, parte de la población parisina aún no logra recuperar la calma. En los lugares públicos se registraron escenas de pánico y se inició una carrera desordenada ante pequeñas explosiones de petardos o gritos histéricos de alguna ama de casa con niños.
Las agencias de noticias reportaron hasta cinco casos de este tipo provocados por estallidos de petardos o “bombillas” o la explosión de un neumático.
Uno de estos casos ocurrió frente al atacado local Bataclan, donde fallecieron poco más de 80 personas. Cientos de personas acudieron a este recinto para colocar ofrendas florales, velas y orar. El estallido de un petardo, en un punto desconocido de la ciudad, generó pánico y correrías. La calma volvió lentamente.
YIHADISTAS. La investigación sobre los atacantes terroristas apunta hacia Bélgica y también a España. La Policía de Francia ha informado a las fuerzas de seguridad españolas que Salah Abdeslam, uno de los presuntos terroristas responsables de los ataques, tendría la intención de entrar a España, según un informe interno de la Ertzaintza citado por el diario español El Mundo.
Según datos de la publicación citada, Salah Abdeslam tiene 26 años y nació en Bélgica. Es familiar de alguno de los siete terroristas fallecidos o abatidos en los ataques. Bélgica lo tenía fichado desde febrero de este año. Al parecer, habría viajado a Siria hace un año.
“Individuo peligroso. En caso de localización, extremar precauciones”, señala la Policía.
EL OCTAVO. ¿Fueron siete u ocho los yihadistas que atacaron París? Al inicio, las autoridades hablaron de siete, todos abatidos, pero el comunicado del EI hablaba de “ocho hermanos” que habían “atacado con precisión objetivos en el corazón de la capital francesa”. Esto aún no ha sido esclarecido.
TRES FRANCESES. Las autoridades francesas identificaron ayer a otros dos atacantes suicidas. Son dos ciudadanos franceses de 20 y 31 años que residían en Bélgica, informó el fiscal de París, Francois Molins. Con ello, al menos tres de los siete atacantes muertos son franceses. Anteriormente había sido identificado un francés de 29 años como uno de los agresores de la sala de conciertos Bataclan.
