Brasil está conmocionada. Uno de los principales jueces que procesa la megainvestigación del caso “Lava Jato”, Teori Zavascki, falleció la tarde de ayer. Fue así luego de que la avioneta en la que viajaba, junto con otras tres personas, se estrelló en el litoral de la ciudad de Paraty, en Río de Janeiro.
Zavascki se desempeñaba como relator del caso Petrobras en el Supremo Tribunal Federal de Brasil y había sido designado para homologar las 77 “delaciones premiadas” que se habían obtenido de altos funcionarios de la empresa constructora Odebrecht.
Según reportaron medios brasileños, la aeronave -un Hawker Beechcraft C90GT- habría salido del Campo de Marte de Sao Paulo, con los cuatro pasajeros, rumbo a Río de Janeiro.
Tras la colisión, los bomberos de la marina brasileña rescataron a una persona con vida, mientras que tres perdieron la vida, entre ellas el magistrado. Hasta el momento se desconoce la causa que precipitó la aeronave hacia el mar.
Su hijo, Francisco Prehn Zavascki, fue quien confirmó la muerte del juez federal.
Y fue precisamente Prehn Zavascki quien hace un año advirtió de las presuntas amenazas contra la vida del magistrado brasileño.
En junio del 2016, Francisco Prehn Zavascki publicó en su cuenta de Facebook: “Si algo le sucede a alguien de mi familia, ya sabe dónde buscar”.
HOMBRE CLAVE. Según información de la justicia brasileña, en febrero próximo, el juez Teori Zavascki tenía que empezar a validar las confesiones de los 77 empresarios de Odebrecht que se acogieron a la colaboración eficaz.
Con ello, no solo políticos y empresarios de Brasil se habrían visto comprometidos. También se iban a afectar personajes de varios países de Latinoamérica, entre ellos el Perú.
Como se recuerda, según han confesado sus funcionarios, la empresa Odebrecht pagó 29 millones de dólares en coimas durante los gobiernos que van del 2005 al 2014.
Es decir que, según las afirmaciones de los empresarios brasileños, los actos de corrupción se dieron durante la gestión del expresidente Alejandro Toledo, el gobierno de Alan García y el régimen de Ollanta Humala.
Es por ello que, de estas 77 “delaciones premiadas”, nuestro país esperaba contar cuanto antes con la de Marcelo Odebrecht. El dueño de la transnacional, quien se reunió con funcionarios peruanos y hasta con expresidentes, ya confesó todo ante los fiscales brasileños el pasado mes de diciembre.
También se espera tener las declaraciones de la secretaria de la constructora Odebrecht, María Lucía Tavares, quien llevaba una lista de personajes y reuniones. Ella fue la primera en informar sobre la existencia de la División de Operaciones Estructuradas, oficina de la que salía el pago de coimas.
Para la justicia peruana, también es necesario contar con la declaración de Jorge Henrique Simoes Barata (gerente y máximo representante de Odebrecht en el Perú), así como de toda la declaración del empresario Alberto Youssef. Este último ya ha brindado algunas declaraciones ante el fiscal anticorrupción Hamilton Castro, quien lleva adelante las investigaciones del caso “Lava Jato” en el Perú.
GRAN PÉRDIDA. Al respecto, el exlegislador y presidente de la anterior comisión “Lava Jato”, Juan Pari, indicó que es lamentable la pérdida del juez Teori Zavascki debido a que en las investigaciones que se siguen a la empresa Odebrecht, los nombres de los implicados ya comenzaban a hacerse públicos.
“Toda muerte hay que lamentarla y más aún de una persona sumamente importante que estaba administrando justicia para que un tema tan transcendente en nuestra América Latina sea aclarado y que está ligado a los grandes escándalos de empresas brasileñas”, expresó.
Manifestó que, al margen de las especulaciones que se podrían hacer en torno a las causas de la caída de la avioneta, es relevante señalar que la pérdida de información “es sumamente importante, así como la capacidad de valor humano de un hombre que busca la verdad”.
La repentina desaparición de Zavascki no solo implica un retraso en el proceso de análisis de los documentos o registros con los que se cuenta, sino también “la propia capacidad de análisis y el conocimiento que tiene la persona sobre el caso”, dijo Pari.
Opinó que estos son elementos irremplazables en las interpretaciones y las conclusiones de las pesquisas que llevan a cabo en Brasil.
MAYOR RETRASO. Por su parte, el abogado penalista Mario Amoretti se mostró preocupado por la repentina muerte del juez brasileño y afirmó que su fallecimiento implica un retraso en las investigaciones que se llevan a cabo en Perú.
“La muerte de este juez en verdad preocupa para el país, sobre todo por las consecuencias que puedan producir, entre ellas, la dilatación del proceso”, señaló.
También indicó que es menester continuar las averiguaciones que explicarían las causas de la muerte de Zavascki, con el fin de que se conozca si fue un hecho accidental o premeditado.
“Si no se trata de una muerte accidental, sino de una muerte premeditada por quienes están interesados en que no se conozca la magnitud o las personas que se encuentran involucradas, estaríamos no solo frente a una investigación internacional vinculada a actos de corrupción, sino también criminal”, remarcó.
Esta opinión también fue compartida por el abogado Benji Espinoza, quien indicó que la muerte del juez brasileño podría afectar el proceso de las investigaciones que se realizan a la constructora brasileña.
“Las colaboraciones solo adquieren valor procesal a partir de la sentencia judicial, por lo que, tras su muerte, tendría que llevarse los acuerdos para su aprobación a otro juez y eso demoraría la llegada de información al Perú”, dijo.
AGILIZARÁN TRABAJO. Tras conocer la lamentable muerte del fiscal brasileño desde la comisión “Lava Jato”, en el Congreso, solicitarán al Ministerio Público agilizar las investigaciones y entregar información necesaria para hallar y sancionar severamente a los verdaderos responsables. Así lo afirmó el legislador Víctor Andrés García Belaunde (AP), integrante de dicho grupo de trabajo.
“Vamos a exigir la celeridad al Ministerio Público y si ellos no dan información, nosotros la empezaremos a dar para que el país vea lo lento de la justicia y de las presiones tan grandes que está sufriendo la Fiscalía, que la está neutralizando”, expresó.
En ese sentido, indicó que la comisión “Lava Jato” ahora trabajará con más entusiasmo para entregar la información a la población “y que no se pierda y que los implicados no huyan ni rehúyan de sus responsabilidades”.
“Vitocho” calificó la muerte del referido juez como “muy extraña” y “rara”; sin embargo, dijo que tiene la plena confianza en que este tipo de información no se pierda y que es evidente que la justicia de Estados Unidos también cuenta con valiosos documentos que pronto serán revelados.
“Esta información no solo estará en la mente del juez sino que deben haber documentos, archivos o computadoras que almacenen los trabajos que se han hecho. Igual, esto es un riesgo para descubrir la verdad de toda esta red mafiosa que está perturbando la tranquilidad de 12 países que se han visto afectados”, añadió.
“Detrás de esto también está la justicia norteamericana, los bancos norteamericanos que actúan con claridad y transparencia y que son verdaderos administradores y denunciadores de la corrupción. Es un ente que no va a pasar desapercibido y hay demasiados contactos en países financieros. Será bastante difícil que se oculte información”, agregó.
En otro momento, García Belaunde dijo que espera que este caso sirva para que el Ministerio Público apure en entregar información para que los responsables sean debidamente castigados.