Alrededor de 200 personas asistían a las fiestas organizadas por el cura italiano Francesco Spagnesi. Actualmente, el sacerdote de 40 años cumple prisión domiciliaria. “Estaba nervioso, tímido y ausente, no le gustaba organizar bautizos, comuniones ni confirmaciones”, declaró una de las asiduas asistentes a las prédicas del religioso. (Fuente: América TV)