Chiquitas 23 setiembre 2019

Redes calientes

Las hostilidades subieron ayer de intensidad en redes sociales. Después de que Becerril enviara un mensaje al fiscal Rafael Vela que los caviares interpretaron como una amenaza a su familia, Indira Huilca lo encaró y señaló que su permanencia en el Congreso es un insulto para los peruanos. Era apenas el primer round.

Saca trapitos

Becerril fue igual de hiriente que su colega, pues le dijo que un insulto es el hecho de que ella se haya “aprovechado” del asesinato de su padre a manos de Sendero Luminoso “para cobrar ilegalmente miles de dólares” y que “utilizara a su madre para usurpar la propiedad pública” con un puesto de comida.

Calaña

Glave salió de inmediato en defensa de su colega de bancada y sostuvo que Becerril cree que todos son de su calaña y que puede agredir no solo a una mujer valiente -¿y sobre las agresiones a las fujimoristas se pronunció?- como Indira Huilca sino a la memoria de un luchador social.

Fantasma Campoy

El sablazo de la izquierdista no quedó sin réplica, porque Becerril le sugirió que vaya preparando su defensa en el caso del negociado de los terrenos de Campoy cuando ella era la mano derecha de Susana Villarán en la MML, pues ese tema será materia de investigación. ¿Será en la Comisión de Fiscalización?

Olor a duelo

La legisladora de Nuevo Perú aseguró tener la conciencia tranquila y le pidió con ironía “un poco más de tranquilidad antes de sacar al matón de quinta” al amenazar a fiscales y jueces. El enfrentamiento tuitero terminó -¿o inició?- con una amenaza más subida de tono escrita por el legislador Richard Arce dirigida a Becerril: “Ya sabes dónde encontrarme”.

Que opine el VAR

Y después que las bancadas de izquierda cuestionaran a Pedro Olaechea por pedir un pronunciamiento de un órgano externo sobre el adelanto electoral, ahora el Frente Amplio solicita que la CIDH y un relator de la ONU opinen sobre el proceso de elección de los magistrados del TC. A este paso, van a pedir que hasta el VAR intervenga.

¿Y los aliados?

La ministra de Agricultura, Fabiola Muñoz, acudió al Congreso el jueves para pedir apoyo a su propuesta de ampliación del régimen laboral agrario, pero ninguna de las bancadas aliadas al Gobierno levantó la voz para respaldarla. La Bancada Liberal, NP y FA demostraron que apoyan al Ejecutivo para disolver el Congreso, pero que para reactivar la economía ¡no se oye, padre!

¡Apóyame, Chorri!

Lo mismo ocurrió con lo que queda de la bancada de PPK, pues en el momento en que apareció la ministra, a Flores y Dávila ni se les veía para secundar una propuesta del Gobierno. Nos cuentan que el premier Del Solar tuvo que llamar al charapa Jorge Meléndez para que se haga una.