Creada como una arteria para unir a lo largo de 16 kilómetros siete distritos de la capital, la avenida Universitaria luce el abandono propio por falta de mantenimiento, ocasionando malestar entre los conductores por el tránsito que ocasiona y por lo vecinos que tienen que esquivar temerarias maniobras de los conductores por no pasar sobre un bache.
"Tengo más de 10 años manejando por esta ruta y no recuerdo que esté en buen estado. En horas punta se forman largas colas para pasar despacio esos huecos, lo que hace incluso que haya gente que se choque", cuenta un chofer de custer mientras espera que los autos crucen los baches ubicados entre las avenidas Universitaria y San Germán, en San Martín de Porras.
Las consecuencias del mal estado no solo aquejan a los conductores, sino también a los vecinos de la zona. "Hasta para tomar el micro hay que tener cuidado, los autos por esquivar los baches se pegan para la izquierda para pasar rápido, sin importar que la gente este ahí parada esperando su carro", comenta Iván Zabaleta, a su vez que pide un mantenimiento de esta vía.
El cuidado parcial que se puede apreciar parte de iniciativas de particulares. Como es el caso de Jorge Capcha, un obrero que rellena con desmonte los enormes baches de la avenida Universitaria, por lo que recibe una propina de los conductores. "Los más agradecidos son los choferes de combis y custer, porque pasan a cada rato por acá. Demoró una hora y media en rellenar un bache y un buen día puede sacar hasta 100 soles", relata mientras estira su balde con el brazo a la espera de unas monedas.