El emblemático conflicto que enfrenta a Magdalena y San Isidro tiene un nuevo protagonista. La Municipalidad de Lima, que trató de mediar la disputa a través del Instituto Metropolitano de Planificación (IMP), se ve ahora envuelta como una parte interesada.
El alcalde de Magdalena, Francis Allison, consideró ayer que la opinión técnica emitida por el IMP es “ilegítima, antiética y parcial”, pues recordó que Flor de María Valladolid, jefa de la entidad, vive en la zona en disputa junto a otros tres familiares, quienes tienen allí cuatro propiedades.
Pedido. El burgomaestre agregó que Valladolid asesoró ad honorem a la Municipalidad de San Isidro, por lo que su opinión “no es técnica” y “busca favorecer” a dicha comuna.
Tras considerar que el actuar del IMP es “vergonzoso, escandaloso y un papelón”, Allison pidió que el alcalde de Lima, Luis Castañeda, “reestructure” la entidad porque ya no genera confianza para resolver los 30 líos limítrofes que existen en la capital.
Valladolid confirmó que su residencia personal se encuentra en Magdalena y podría pasar a San Isidro, al igual que los predios de sus familiares, pero indicó que ello es un “hecho anecdótico”.
En tal sentido, añadió que “la vivienda del señor (Francis) Allison y sus propiedades”, actualmente en Magdalena, también formarán parte del distrito vecino en caso se apruebe la propuesta de Lima. Allison coincidió en señalar que “es una anécdota”, pero recordó que el IMP no es una instancia definitiva, de modo que su propuesta aún puede ser apelada ante la Presidencia del Consejo de Ministros.
El informe en cuestión entrega a San Isidro 33 de las 44 manzanas en disputa y deja solo 9 a Magdalena.
Responde. La titular del IMP defendió de forma enfática el documento elaborado por su institución y retó al alcalde Allison a “tener la valentía de reconocer que se equivocó”.
Además, lo acusó de tratar de “ensombrecer” el debate con “argumentos que no tienen nada que ver con el tema de fondo”.
Valladolid recordó que el informe se sustenta en documentos y planos históricos desde 1821 hasta 1931, por lo que consideró que “es irrefutable, explícito, exhaustivo y objetivo”.
Papeles. El IMP confirmó que aún no ha recibido la respuesta formal de ninguno de los municipios involucrados en el conflicto.