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Alejandro Ascoy Villón

Alejandro Ascoy Villón, cantante criollo y guitarrista, fue un defensor de la música criolla, llevando sus llamados valses callejoneros a toda la Lima de antaño. Antes de formar el dúo “La Limeñita y Ascoy”, junto a su hermana Rosa Dolores, ya había integrado el dúo conocido como “Ascoy y Costa”, en 1931, trabajando también en dos películas peruanas: “La última lágrima” y “La huérfana de Ate”. Debutó junto a su hermana con el dúo “La Limeñita y Ascoy”, en un programa, el año de 1937. Iniciaron sus presentaciones auspiciados por empresas eléctricas, en sociedad con el programa “Mi Guitarra y yo”, presentándose días después en el teatro municipal. También, fueron contratados por Radio Nacional.

Fue un criollo de la llamada “Guardia Vieja” y uno de sus discos que alcanzó más popularidad fue “Glorias de la Canción criolla”, siendo considerado junto a su hermana Rosa, como uno de los mejores dúos de la música criolla. Hicieron populares los temas “Las cadenas”, “mi primera elegía”, “Vicenta”, “Tal vez”, “La pasionaria”, entre otros.

Alejandro y Rosa Ascoy, recibieron reconocimientos y premios, siendo aplaudidos por un público que gozaba al escuchar sus peculiares e incomparables voces. Sus seguidores abarrotaban auditorios, salones de baile, restaurantes, teatros, emisoras radiales y cines de Lima y callao. En su despegue al extranjero dieron grandes presentaciones en 1939, primero en Chile y luego en Argentina. En Venezuela llegaron a tener mucha popularidad.

“Se trabajó mucho y se ganó poco”, comentó Alejandro, en una entrevista que le hizo el destacado periodista, Alfredo Kato el año 1972.

Alejandro Ascoy Villón, “La voz dulce”, del criollismo, siempre fue un hombre bohemio, y en una etapa de su vida fue víctima de la llamada “enfermedad de la jarana”, que lo alejó por un buen tiempo de sus presentaciones. Después de su recuperación, dejó de beber licor, llevando luego una vida tranquila y disciplinada. Cantó más de 40 años junto a su hermana Rosa Dolores. Vivió en Barrios Altos y sus últimos días la pasó en el distrito de Barranco. El 17 de setiembre de 1985 dejó de existir.

Algunas curiosidades:

El “Dúo La Limeñita y Ascoy” fue discriminado por algunas televisoras de ese tiempo.

Alejandro y Rosa llegaron a sentir molestia por algunos procederes de Augusto Ferrando y su peña, es por eso que siempre trataron de evitarlo.

Falleció dos días después de haber estado en un almuerzo que ofreció el Presidente Alan García Pérez, a los artistas peruanos.

Nunca tuvieron una vivienda propia.

No recibieron ningún tipo de ayuda económica.

En esta galería les mostramos fotografías inéditas de uno de los defensores de nuestra música criolla.