Mauricio Salas: “El teatro ofrece que los niños aspiren a un mundo mejor”

Mauricio Salas, director del Gran Teatro Nacional (GTN), cuenta que los escolares, cuando entran por primera vez a este lugar, dicen en un cuestionario que quieren ser abogados o médicos. Sin embargo, al salir de un espectáculo o una visita guiada, otras profesiones, vinculadas a la música y las artes escénicas, aparecen en las respuestas de los niños. Eso busca Salas: acercar a los peruanos al teatro, a la cultura, y que el público se deslumbre no solo por la majestuosidad y belleza que ofrece esta institución, sino también por los espectáculos nacionales e internacionales que muestran desde hace cinco años.

¿Cuál es el balance del Gran Teatro Nacional en sus cinco años? 

Es un balance positivo e intenso. Creo que el GTN, en muy poco tiempo, ha logrado consolidar lo que a otros espacios teatrales les toma muchísimos años. En cinco años, el Teatro se ha posicionado como la principal plataforma del país para la promoción de las artes escénicas y musicales. Es un trabajo que se hizo junto a una fuerte conciencia de la importancia de la formación de nuevos públicos para el teatro, la música sinfónica, la danza, la ópera.

¿Hay estadísticas que miden el trabajo realizado hasta ahora? 

Sí. El GTN se inauguró en 2011. A partir de entonces, hemos podido ver un incremento sustantivo de público que lo podemos medir, de manera sostenida, recién desde 2013. Es decir, desde el momento en que la programación ya tiene unos lineamientos estables y claros. Así, nuestro crecimiento es casi del 25% de público de manera permanente. También hemos traído 140 mil niños al teatro, a través del programa de formación de públicos.

¿Cómo fue y es el trabajo con los niños? 

Este es un logro sumamente trascendental, pues consolida una de las tareas más importantes del teatro. Cuando nace el programa de formación de públicos, se tiene claro que se debe hacer una alianza con los colegios. Por ejemplo, tenemos la meta de poder llegar a todos los distritos de Lima. Poco a poco, establecer una estrategia acorde con las UGEL para abarcar la totalidad de los colegios de Lima. Y, de la misma manera, en alianza con el Ministerio de Educación, poder llegar a los colegios de provincias.

¿Qué otros tipos de espectáculos se realizan para acercar a los peruanos? 

Creo que el mayor capital que tiene el teatro, en su programación, es la diversidad. En un mismo espacio, cualquier ciudadano puede disfrutar desde música sinfónica hasta las creaciones contemporáneas, folclor o tradiciones populares. O de artistas que tienen propuestas innovadoras o muy propias. Creo que ese es el mayor capital del teatro. Pero ahora viene otro reto: ¿a quién se dirige este contenido?, ¿a quiénes verdaderamente queremos llegar? Por eso, hemos entendido que el teatro, de cara al futuro, tiene que hacer esfuerzos muy grandes para convocar a diferentes tipos de público.

¿Por qué la gente debe ir al GTN cuando se vive una difícil coyuntura social y política? 

Justamente por eso. Porque el teatro lo que propone es un espacio de reflexión neutro, donde las personas se puedan ver y encontrar. El teatro ofrece una solución desde la puesta artística. Ofrece esperanza y la posibilidad de que un niño no solo aspire a lo que ve en su entorno inmediato, sino que aspire a un mundo mucho mejor. Creo que ese es el rol del teatro.

A veces la gente no asiste porque piensa que las entradas al GTN son caras, pero no es así, ¿cierto?

No es así. Y creo que tal vez lo más importante, incluso más que el precio, es el interés. Tenemos que fomentar el interés en las personas, que se rompan esos prejuicios y esas barreras que a veces hacen que no podamos disfrutar de una oferta cultural importante que hay en la ciudad. El GTN tiene una política de precios muy fuerte. Tenemos entradas desde S/ 7.50. En ese sentido, la escala de precios nos ubica de una manera más accesible que el cine, por ejemplo. No hay excusa para no venir al teatro. Ahora, tal vez lo que nos falta un poco son mecanismos de comunicación y convocatoria que permitan al público animarse, dar ese primer paso y asistir permanentemente.

¿Qué imagen del GTN quieren mostrar a la gente? 

Para mí, lo más importante es que las personas vean al GTN como el espacio propio, de uno, de todos. Me interesa que las personas, cuando vean este espacio, se encuentren con un lugar al que todos tenemos derecho de ser parte, de construir conjuntamente y de encontrarnos. Yo creo que el GTN tiene que ser, en esencia, un espacio público, en todo el sentido de la palabra. Un espacio donde la gente se sienta recibida, acogida; pueda venir y participar de cualquier manera, ya sea como público, parte del personal artístico o como parte de algún proyecto específico. Creo que todos debemos ser parte del GTN. Ese es el gran reto para mí en este momento. 

Mauricio Salas. Comunicador. Estudió Comunica-ción en la Universidad de Lima. Trabajó 9 años en el Ministerio de Cultura como director de Fomentos de las Artes y de Elencos Nacionales.

6 meses tiene Salas como director del Gran Teatro Nacional.

1415 personas es la capacidad que puede albergar el teatro.