Estamos llegando al final del año escolar. Es normal que los niños y adolescentes sientan presión ante los exámenes y proyectos finales, ya que se define si llevarán algún curso de reforzamiento, repetirán el año o tendrán un buen cierre académico. Para ello, los padres de familia deben ser el soporte y guía que los ayude a aliviar esta carga.
“Para ayudar a los hijos a enfrentar esta etapa determinante, es esencial iniciar con una planificación efectiva. Nosotros creemos que es importante colaborar con ellos para crear un horario de estudio, donde se dividan las tareas de forma manejable y estableciendo metas diarias. Esto hará que esté mejor organizado y con ello reducirá el estrés y mantendrá un enfoque claro durante este periodo”, sostiene Patricia Espinoza, psicóloga y directora general de los colegios Villa Caritas y San Pedro.
En ese sentido, la especialista brinda algunos consejos a los padres para que puedan apoyar a sus hijos en esta etapa:
- Establecer metas claras: Ayuda a tu hijo a tener metas realistas y alcanzables a término del año escolar. Pueden incluir metas académicas, al bienestar emocional, personales y a la gestión del tiempo.
- Brindar un espacio de estudio adecuado: Asegura que tu hijo tenga un lugar tranquilo y bien iluminado para poder estudiar. Se deben minimizar las distracciones y ofrecer un ambiente propicio para el aprendizaje.
- Tener rutinas: Tener labores establecidas a diario, ayudará a tu hijo a sentirse más en control y reducir el estrés. Esto incluye tener horarios regulares para comer, estudiar, jugar y descansar.
- Fomentar el descanso: A pesar de la presión, es importante que los hijos tengan suficientes momentos de descanso, teniendo un equilibrio con el estudio. Esto contribuye a un rendimiento académico sostenido.
- Celebrar los pequeños logros: Reconocer y celebrar los logros que va alcanzando tu hijo, puede ayudar a tenerlo motivado y reducir la ansiedad.
- Propiciar espacios de encuentro familiar: Para que se compartan experiencias vividas, se comenten actividades y suscite una mayor unión familiar.
El apoyo emocional desempeña un papel fundamental en esta etapa. Escucha las preocupaciones de tu hijo y demuéstrale que estás allí para apoyarlo. La empatía y el entendimiento pueden ayudar a reducir el estrés, permitiendo que tu hijo se sienta respaldado emocionalmente mientras se enfrenta a los desafíos académicos, concluye Espinoza.