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En el 2014, el Gobierno aprobó normas relacionadas con la seguridad ciudadana, entre ellas la que exige validar la identidad de todas las personas que compran una línea celular.

Así, dispuso que todas las empresas (Movistar, Claro, Entel y Bitel) que vendan una línea celular tienen la obligación de verificar la identidad del comprador mediante el Sistema de Verificación Biométrica de Huella Dactilar (sistema biométrico).

El  también dispuso que esas empresas utilicen, de forma obligatoria, la identificación biométrica, a nivel nacional, desde el 1 de enero del 2017.

Desde este año, las cuatro operadoras están implementando, de forma progresiva, la identificación biométrica en sus puntos de venta, lo que les demanda una inversión.

CHIPS. El objetivo de esa exigencia es reducir la suplantación de identidad para disminuir la delincuencia.

Sin embargo, la Cuarta Disposición Complementaria Final del Decreto Supremo N° 003-2016-MTC establece que los operadores móviles virtuales (OMV) y los operadores móviles en red (OMR) solo exigirán, para vender sus chips, la verificación de la huella dactilar recién desde el 1 de enero del 2020.

Actualmente opera en el país, de manera comercial, un OMV: Virgin Mobile.

Es decir, por tres años más se seguirán vendiendo chips sin la validación biométrica.

Al respecto, la presidenta de la consultora Alterna Perú, Liliana Ruiz, dijo a Correo que dejar tres años sin el control biométrico a la venta de chips, por parte de los OMV y OMR, implica tener “un hueco” que va en contra del objetivo de las normas de seguridad que se quiere para el país.

GRAN VACÍO. En ese sentido, refirió que las reglas deben ser iguales para todos.

“Empezando que las operadoras de redes móviles están invirtiendo para poder hacer la verificación biométrica. Segundo, porque se distorsiona la esencia de la misma norma y no se asegura en su totalidad la seguridad”, comentó.

Ruiz explicó que no entiende por qué se ha dispuesto que las OMV y las OMR no tengan la obligación de exigir la verificación biométrica, porque dejando “ese hueco” no se logrará el objetivo primigenio, como es evitar el uso indiscriminado de la telefonía móvil para cometer una serie de fechorías.

“Si se interviene en un mercado tan competitivo como el de la telefonía celular, las normas deben ser iguales para todos, no deben ser alteradas, no deben ser distorsionadas”, comentó.

CIFRAS 

30 millones de usuarios de celulares se registraron a junio de este año en el Perú.

56% de la facturación del mercado de celulares en Perú lo representaron los smartphone.

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