Tristán Ramírez Ruiz de la Prada: “La moda hay que usarla porque te divierte”
Tristán Ramírez Ruiz de la Prada: “La moda hay que usarla porque te divierte”

Tristán Ramírez Ruiz de la Prada, hijo de la famosa diseñadora de modas Ágatha Ruiz de la Prada y de uno de los periodistas más destacados en España, Pedro J. Ramírez, llegó a nuestro país y no hizo falta una presentación para distinguir que era el progenitor de la creadora de innumerables tendencias y productos con diseños distintivos y coloridos. En esta entrevista, Tristán viste una camisa fucsia y un pantalón color mostaza.

Hace medio año se convirtió en el CEO de la reconocida firma española de su madre, que reúne una increíble oferta de artículos que van desde vestidos, sábanas, bolígrafos, pijamas, estanterías, alfombras, relojes hasta vajillas y cascos de moto. Pronto abrirá una cadena de minitiendas en Lima con proyección a la expansión por el Perú.

¿Por qué les llamó la atención el mercado peruano? Para nosotros, Latinoamérica en los últimos años, ha sido muy importante. Estamos en 180 países, pero muy dispersos, por eso ahora queremos mostrar todos nuestros productos en el mismo sitio y venderlos juntos. En Perú hemos tenido mucho éxito mediático, y llevamos varios años aquí desde 2005 porque empezamos a colaborar con una tienda retail. Desde 2011, tenemos un establecimiento de ropa para niños en el Jockey Plaza, pero ahora que han venido todas las marcas de fast fashion internacional ha cambiado el mercado y queremos hacer algo más flexible, con la idea de diversificar parte de la moda para niños.

¿Qué aportes le ofrecen tu hermana Cosima y tú a la marca? Estamos en la segunda generación, que en todas las empresas es un paso crucial, pues hay ejemplos de muchas marcas que desaparecen con la diseñadora principal, y otras que se convierten en imperios, esperamos ser la segunda. Mi hermana lleva dos años en la empresa y maneja muy bien el tema de imagen y redes sociales. Le encantan las cámaras con las que tiene mucho éxito, y está inmersa en el tema de diseño porque tiene muy buen ojo para la moda. Ahora estamos trabajando en ir por un tipo de cliente mucho más joven, más fashion, llevado por las tendencias que se ven en las redes sociales. Yo, por mi lado, he llevado todo esto a distancia, pero desde hace 5 meses he trabajado en las mismas instalaciones de la empresa como director general.

Me comentas que la pasaron muy mal en la crisis económica que golpeó a Europa, ¿cómo sobrevivieron a esta situación? La crisis fue muy dura en 2008 en España e hizo que muchas empresas desaparecieron, eso nos afectó mucho. Ahora estamos buscando mercados nuevos. Lo que nos hizo sobrevivir a la crisis fue el mercado de Latinoamérica que empezó a crecer, y con eso hemos tenido mucha suerte.

Desde muy pequeño has estado inmerso en el tema de la moda, ¿qué representa para ti? Una evolución social que se ha dado durante los últimos 40 años, ha sido una democratización. Antes era algo a la que solo una élite muy específica podía aspirar, era la alta costura en Francia, una cosa hecha a medida, cara y evolucionaba muy lentamente. En cambio, hoy se ha convertido en cosa de masas donde todo el mundo puede vestirse como quiera, aunque al final toda la gente sigue las mismas tendencias. La moda está cambiando a un ritmo brutal y cada vez con influencias más diversas. Se ha internacionalizado por el mundo de las redes sociales y me parece que es una forma de expresión, hay que usarla porque te divierte y no porque la lleve todo el mundo.

¿Hay algún aspecto negativo que destacar? Es que se ha homogeneizado mucho. A nivel internacional, las tendencias empiezan a ser todas similares. Cuando viví en la India, por ejemplo, una de las cosas bonitas que descubrí es que en ese lugar el estilo todavía se ve reflejado en su cultura tradicional. Los diseñadores indios son fantásticos, utilizan formas ancestrales. La moda allí tiene una evolución diferente a lo que se ve hoy en los centros comerciales de todo el mundo.

ALGO MÁS.

180 países comercia-lizan el amplio catálogo de productos de la diseñadora española.

200 millones de euros es la suma que se calcula por todas las licencias que utiliza la firma española.

TAGS RELACIONADOS