Gobierno declara en emergencia centros de salud (Foto: Difusión)
Gobierno declara en emergencia centros de salud (Foto: Difusión)

En la región de Arequipa el 30%, es decir, 60 establecimientos de salud, necesitan una pronta intervención debido a su deficiente estructura y falta de equipos médicos, informó hoy el gerente regional de Salud de Arequipa, Walter Oporto.

El funcionario explicó que esta es la cantidad de centros de salud que deberá coberturar el decreto supremo 014-2023-SA, que emitió el Gobierno central, el cual declara en emergencia los establecimientos de salud del Ministerio de Salud y de los gobiernos regionales por 180 días.

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Entre los establecimientos de salud por atender en la región están el centro de salud Ático, de la red de salud Camaná-Caravelí, los hospitales de Camaná, Honorio Delgado y Goyeneche.

“Estamos trabajando con fichas técnicas y expedientes respecto a las deficiencias que tienen los hospitales más antiguos. El decreto ayudará a que se agilicen las mejoras que necesitamos”, expresó.

Así también, espera que con el estado de emergencia se dé una respuesta a la solicitud de cierre de brechas de recursos humanos. Preciso que son 1500 trabajadores de salud, entre doctores, técnicos, administrativos y otros, que se requieren para la atención de la población.

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DECRETO

El decreto advierte que según el Informe N° 106-2023-UPP-DIEM-DGOS-MINSA, de la Dirección General de Operaciones en Salud (DGOS), el estado situacional de la infraestructura de salud, en forma general, presenta una deficiente capacidad de respuesta ante las intensas lluvias, con coberturas y techos que no tienen un sistema de drenaje adecuado y otras en la que no existe, presentando filtraciones que afectan la estabilidad de la infraestructura física y el daño del equipamiento existente. Asimismo, riesgos eléctricos en las instalaciones, colapso del sistema de saneamiento externo e interno (agua y desagüe).

Por lo que, frente a un fenómeno de El Niño, pudieran verse afectadas y suspender su ofertas de salud. Asimismo, se dejaría de lado la atención a las poblaciones afectadas y representaría mayores costos de reparación y continuidad del servicio.

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