La técnica en Enfermería Flor Ángela Rivas Chirinos (39) deberá responder ante la justicia por el fallecimiento de la menor F.P.N. (12), hecho ocurrido en uno de los dormitorios del Centro de Acogida Residencial (CAR) Casa Isabel, ubicado en la avenida Salaverry del distrito de Socabaya.

El miércoles 21 de julio a las 20:25 horas se encendieron  las alarmas en Casa Isabel, la menor que no hablaba y sufría síndrome de Cornelia de Lange (anomalías en extremidades superiores y retraso del crecimiento y psicomotor), no podía respirar y se encontraba mal de salud. Fue trasladada a Emergencia del hospital Goyeneche, pero la pequeña había llegado sin signos vitales.

Jacqueline Gonzales Bernal, coordinadora de Casa Isabel, verificó la cámara de video de la habitación y pudo visualizar que la cuidadora Flor Rivas se encontraba recostada encima de la menor por varios minutos.

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Todo quedó registrado en un video

Previamente, el vídeo registra como la niña lucha por su vida al forcejear con la mujer que usó la sábana de la cama y sus manos para dejarla inconsciente, no contenta con esa acción decide subirse encima donde permaneció por varios minutos.

Luego, la cámara registra el ingreso de la técnica para suministrarle la medicina, pero la menor ya no respondía al llamado y al movimiento.

Tras la denuncia de Gonzales Bernal en la comisaría de Ciudad Mi Trabajo, un grupo de policías procede a la detención de la sospechosa a la media noche, mientras el cuerpo sin vida de la pequeña fue trasladada al área de patología del nosocomio y posteriormente internada en la morgue central de la ciudad.

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Diligencias. Detectives de del área de Homicidios de la División de Investigación Criminal (Divincri) se hizo cargo de las diligencias con la aprobación de la fiscal Magaly Mendoza Yana, de la 2da Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Paucarpata.

Horas más tardes, la necropsia realizada en la morgue determinó que la causa de muerte de la pequeña fue por asfixia mecánica por sofocación externa, hecho que se consumó en el momento  del aplastamiento.

Trataron de justificar lo sucedido

Eduardo Copara Vargas, abogado de la investigada Flor Rivas Chirinos, señaló que su patrocinada viene laborando en Casa Isabel desde hace 15 días, pero justo la noche del miércoles era su primera guardia nocturna.

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El abogado defensor buscó justificar la acción amparándose en la inexperiencia para ejercer el trabajo, pero que no tenía motivos para matar a la menor.

“La enfermera de la guardia anterior le indicó que debía tomar algunas medidas para que la menor pueda descansar. Efectivamente actuó conforme le dijo su colega. El procedimiento era agarrarle las manos para que pueda descansar. En esas circunstancias la menor se habría asfixiado. Mi patrocinada refiere que en ningún momento existió dolo”, dijo.