En pleno siglo XXI, en un país que su presidenta Dina Boluarte afirma que se apoya a las zonas rurales, existe una desigualdad social y hasta temporal, pues aún en varias regiones, algunas personas viven en pequeñas viviendas edificados con piedras, barro, pasto e ichu y Arequipa no es la excepción a esta realidad.
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A más de 10 horas de la ciudad de Arequipa, se encuentra el centro poblado de Jachaña, en la provincia de Caylloma, al igual que varios anexos que, según sus pobladores, han sido olvidados por el Gobierno central.
OLVIDADOS
No es la primera vez que el reclamo, pero su voz no tiene eco ni en el Gobierno Regional de Arequipa (GRA), ni el Gobierno central, para el alcalde del Centro Poblado de Jachaña, Mauro Yucra Soto, es como si no existieran.
Ya en 2023, expuso el problema al GRA, pero poco o nada se ha hecho, tampoco se han tomado las previsiones respectivas y la población sufre por el crudo invierno que ha congelado las casas, riachuelos y parte de los cultivos.
En esas circunstancias, los pobladores solicitan a los ejecutivos del Ministerio de Vivienda y construcción la instalación de “casitas calientes”.
El alcalde Yucra Soto, sostiene que casi el 100% de niños y ancianos sufren de enfermedades respiratorias por las bajas temperaturas, que en las madrugadas desciende hasta los 12 grados bajo cero.
“Existen varios programas del Estado, del Ministerio de Vivienda y Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social para construir Casas Calientes, pero no llegan a las alturas de Caylloma, sobre los 4 mil 500 metros sobre el nivel del mar, solo llegan a los 3 mil metros, les da miedo la altura a los funcionarios del Estado Peruano”, criticó duramente Mauro Yucra Soto.
Sin ambulancias ni salas de parto. Otro problema que expuso la autoridad es la decadencia de un buen centro de salud, la infraestructura actual es deficiente, además de equipos médicos obsoletos.
“Desde el 2015 se está exigiendo una ambulancia al Ministerio de Salud y la construcción de una sala para las madres gestantes la actual está abandonada con huecos en el techo, las dos ambulancias del Ministerio de Salud están malogradas desde hace 20 años y las motocicletas averiadas”, señalo Mauro Yucra.
SUFREN
En un recorrido por los anexos, los vecinos afirman que el agua se congela y eso les dificulta la preparación de los alimentos, los niños son los que sufren por las inclemencias del clima, algunos ni siquiera pueden ir al colegio porque también su centro educativo está en pésimas condiciones.
Sus casas son de adobe porque de cierta manera pueden guardar el calor, pero ante la presencia de la helada, el frío llega a penetrar hasta los huesos.
A esto también hay que sumar que no existen las condiciones para la crianza de camélidos, al no haber suficiente comida, terminan muriendo por falta de alimento.
Esperan también más interés por parte de la comuna provincial de Caylloma para que puede interceder ante instancias superiores.
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