En cumplimiento a la orden de desalojo del Poder Judicial de Mollendo, ayer se retiró a un total de 500 familias asentadas en 168 mil metros cuadrados de la asociación Fuerte Catarindo en la provincia de Islay.

Un contingente policial ingresó al terreno en mención, con tanquetas y caballería, para dar cumplimiento a la orden judicial a favor de la familia Tohalino, aproximadamente a las 4:00 horas.

PACÍFICO

Solo al principio hubo roces con algunas personas que obligaron a la Policía a usar bombas lacrimógenas, el resto de la mañana fue pacífica.

Los dirigentes de esta asociación señalaron como responsable al juez Cary Choque, contra quien se quejaron en la Odecma y la Fiscalía.

Los pobladores del lugar refieren que estos terrenos le pertenecen a la Municipalidad Provincial de Islay. Mencionaron que fueron estafados por Crisólogo Núñez Gallegos, quien les vendió terrenos que habrían comprado a algunos familiares de los Tohalino, en juicio con el Estado, pues argumentan ser dueños de casi todo los terrenos de Mollendo.

Orden. En enero de este año se ordenó el desalojo por tercera vez, pero se suspendió la decisión del juez por falta de garantías.

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