Sismo en Arequipa: Las historias de familias que perdieron sus casas y piden apoyo

La tierra no deja de temblar en el valle del Colca .”Padre nuestro, líbrame de todo mal” empezó a orar con desesperación Senovia Quispe, de 78 años de edad, mientras ocurría un sismo de 4,1 grados, uno de los más fuertes de los 7 sismos que se registraron ayer en Maca.

Su dormitorio, su cocina, comedor, todo quedó en escombros por lo que tuvo que pasar las últimas 2 noches en la casa de su vecina.

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Claudio Suyo Chávez, de 79 años de edad, durmió las últimas dos noches en el patio de su casa, porque sus 5 cuartos colapsaron con el temblor de 5.5 grados de la madrugada del martes.

“Me salvé de milagro, porque la pared que cayó no alcanzó a mi cama, luego del sismo me fui a la plaza y ahí amanecimos sentados con mis vecinos”, dijo.

Al regresar a su casa, aproximadamente las 4:30 horas, se dio con la sorpresa que los otros cuartos también estaban en escombros, pues por la oscuridad y el susto solo salió de la habitación.

Sus camas, colchones, cocina, ollas platos, la cosecha del maíz y todas sus pertenencias quedaron bajo las piedras y  la mañana de ayer, recién recuperó al patio con el apoyo de los soldados del Ejército.

Su hija María Suyo llegó a su vivienda para improvisar una fogata y preparar el almuerzo.

“Hasta ahora no llega ninguna ayuda, no hemos recibido nada, ojalá nos den un módulo para dormir y guardar mi maíz, porque puede llover” señaló.

DISTRITO DE MACA QUEDÓ EN ESCOMBROS CON LOS SISMOS

Son aproximadamente 60 a 70 las familias damnificadas que lo perdieron todo en el distrito de Maca, según el reporte de Gestión de Riesgos de la Municipalidad de Maca, hasta ahora el más afectado. Sin embargo, varias familias dijeron que aún no habían recibido la visita de los evaluadores.

Todas las casas a base de piedra y adobe colapsaron.  Eugenia Nina Suyo, también llora por el derrumbe de su único cuarto. Su cocina y sus ollas fueron enterrados por los adobes y hasta ayer no pudo sacarlos, porque tampoco tiene a alguien que la apoye. “No tengo plata, quién me va a ayudar a construir, dónde voy a dormir?” Se interrogó esperando una respuesta de aliento.

Todos los pobladores esperan una ayuda, un consuelo y una palabra de aliento. En medio de su desesperación y de sentirse escuchados y quizás descargar su dolor, piden que las autoridades vayan a sus casas para verificar la magnitud del daño, pues hasta ayer en la mañana, no se visitó a todos los predios.

No cuentan con herramientas como carretillas, picos o lampas para levantar la cantidad de escombros.

Praxides Zavala, es una adulta mayor de 72 años de edad, quién empezó a llorar luego de una de las réplicas que se registró ayer. Dijo sentirse sola, pues la nostalgia la embarga al observar que su pueblo y ciudad de toda su vida se desmoronó.

Luego del temblor salió de su casa de bloquetas, pero se encontró sin salida porque la pared de adobe obstruyó la salida. Salió a la calle como pudo, gateando, tal como lo hizo ayer, porque nadie la ayudó a despejar su ingreso. “Estoy sola aquí, mis hijos se fueron a Arequipa para hacer estudiar a sus hijos. Si me voy, qué voy a hacer, de qué voy a vivir, yo estoy acostumbrada a la chacra”, lamentó entre sollozos.

PIDEN LA DONACIÓN DE MÓDULOS PREFABRICADOS

Eleuterio Quispe Mayhua es otro poblador que esperaba la ayuda de las autoridades y agradece a Dios que su esposa y su hijo no estaban la noche del temblor, porque de lo contrario, estaría de luto. La pared de su cuarto cayó a la cama donde dormía su esposa y por el otro extremo donde dormía su hijo. “Salí como estaba vestido y me salvé”, dijo.

La noche del miércoles fue a una de las 10 carpas que instaló la Municipalidad de Maca en la Plaza de Armas para dormir, pero tuvo que salir y volver a su cuarto destrozado, porque unos familiares con bebés necesitaban el espacio. “No había más colchones, tuve que regresar a dormir aquí entre los escombros” dijo.

Las historias se repiten, todos lloran por sus pérdidas, porque no tienen las fuerzas ni los recursos para construir sus viviendas, porque la mayoría son adultos mayores. La entrega de un módulo de vivienda prefabricado es lo que esperan, pero lamentablemente hasta ayer no había nada.

La gobernadora Kimmerlee Gutiérrez acudió anoche a la zona, llevando algunas frazadas para entregar a los afectados, pero el clamor de los pobladores fue la entrega de módulos, y la autoridad se comprometió a llevarlos.

Al lugar también llegó el presidente del Consejo Regional, José Luis Hancco, quien se comprometió con los damnificados a convocar una sesión de consejo para declarar en emergencia los distritos de Maca, Lari, Madrigal el centro poblado de Pinchollo en Cabanaconde, que son los más afectados por el sismo.

400 HECTÁREAS EN PAMPAS DE MAJES SIGUAS PARA POBLADORES DE MACA

A partir de esta crisis el alcalde de Maca, Sixto Rosas, agilizará la adjudicación de terrenos en el P-B5 en la pampa de Siguas dónde se destinó 400 hectáreas para los pobladores de Maca, debido a los constantes daños que sufrieron hace décadas por los deslizamientos de tierra.

Inicialmente, en la gestión de Juan Manuel Guillén, el terreno se separó como reposición de tierras, pero en la gestión de Yamila Osorio se cambió la denominación por reasentamiento poblacional, pero el proyecto quedó obstruido, porque ello implicaba considerar la construcción de colegios, hospitales y todos los servicios básicos.

En la gestión de Elmer Cáceres Llica, se volvió a cambiar la denominación del proyecto por reposición de tierras solo para cultivos. A la fecha están en tratativas para la adjudicación gratuita para los 100 empadronados.

DECEPCIÓN POR ENTREGA DE UNA MANTA

En Madrigal y Lari los pobladores se reunieron en la plaza con la esperanza de recibir un módulo de vivienda, pero sintieron una decepción al enterarse que solo recibirían una manta. Justina Zuni lloraba mientras limpiaba una foto de su hermana que falleció hace años y quedó empolvada junto a la imagen del Señor de Los Milagros, producto del derrumbe de su vivienda en el distrito de Madrigal.

El alcalde de Madrigal, Juan Tejada, señaló que en el distrito registraron 580 damnificados hasta ayer, 1, 300 familias afectadas, sin embargo, el Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER), solo dejó 4 carpas.

La jefa del COER, Bárbara Cuadros, señaló que la atención se priorizará a las familias que se quedaron sin ambientes habitables.