Pese a que el Minsa autorizó el uso de piscinas para fines formativos, administración del centro recreacional les impide ingreso.
Pese a que el Minsa autorizó el uso de piscinas para fines formativos, administración del centro recreacional les impide ingreso.

Después de más de 30 años, la administración del Vivero Forestal de Chimbote cerró sus puertas a cinco academias de natación que venían formando deportistas en esta ciudad.

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Los entrenadores de las academias Juan Carlos Aznarán, Bioswimming, ABC, Aquática y Team Joel protestaron porque el centro recreacional no tiene argumento para cerrar la piscina de Chimbote para uso formativo.

“Las piscinas privadas de Chimbote y Nuevo Chimbote siguen trabajando normalmente en el uso formativo como manda la norma del Ministerio de Salud, pero el administrador del Vivero, Pascual Yzaguirre Sabino, nos ha dicho que no podemos trabajar”, indicó Alfonso Alfaro, de la academia ABC.

Según el instructor, el argumento de Yzaguirre Sabino es que Bienes Nacionales les ha comunicado que el vivero está lucrando con la piscina.

“Eso es contradictorio porque esta administración ha concesionado la mayoría de espacios del vivero, todo lo alquila y nosotros pagamos por usar la piscina”, protestó Alfaro.

Llamado a obispo

Por su parte, el profesor de natación Juan Carlos Aznarán pidió al obispo de Chimbote, monseñor Ángel Francisco Simón Piorno, que intervenga y les permita que sigan trabajando cumpliendo con los protocolos de bioseguridad como lo han venido haciendo el 2021.

“Hemos pedido el apoyo del regidor Carlos Lynch que es un promotor de la natación, a través de él se ha enviado una carta al obispo Piorno para que atienda nuestro reclamo. El Vivero Forestal y su piscina son patrimonio de Chimbote, no podemos cerrarla para uso formativo, no es justo que nuestros deportistas representen a otras ciudades en torneos nacionales, como ahora mismo tenemos al joven Joaquín que se entrenó con nosotros, pero representará a Trujillo. Este joven está a un paso para llegar a la selección nacional”, remarcó.

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Finalmente, Keivin Carhuachín, de la academia Bioswimming hizo un llamado a los padres de familia a pronunciarse sobre la decisión desacertada del administrador Pascual Yzaguirre del Vivero Forestal.

“Nos han querido aburrir, hasta empíricos nos han dicho, pero los entrenadores hemos sido capacitados por la Federación Peruana de Natación. No es justo que cierren nuestra piscina. Todas las demás, de Chimbote y Nuevo Chimbote están trabajando para uso formativo”, añadió.

A su turno, el regidor Carlos Lynch Rojas pidió al obispo Piorno que atienda el reclamo de los entrenadores de natación.

“Cumpliendo los protocolos de bioseguridad debe permitirse que trabajen como ocurrió el 2021. Hay niños, jóvenes y adultos como yo que participamos de las clases formativas de natación. Hemos acudido correctamente y no hubo problemas, no entiendo porqué la administración pone como argumento que Bienes Nacionales los ha observado. Incentiven el deporte”, mencionó el concejal.

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