Miles de devotos abarrotaron ayer el distrito de Santa Rosa de Ocopa, donde acompañaron emocionados la procesión de Santa Rosa de Lima. La parroquia del convento de Santa Rosa de Ocopa estaba repleta de fieles durante la misa, que se vuelve a celebrar multitudinariamente luego de dos años, que no se realizó debido a la pandemia.
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Lorenza Aguirre del barrio de Chilca y presidenta de la festividad, llevaba en sus manos, los cirios junto a sus familiares que se encargaron de la organización de los actos litúrgicos, junto a los sacerdotes franciscanos.
“Nuestra fe hacia Santa Rosa de Lima vuelve a renacer, los fieles devotos han esperado con mucha emoción y miles se han congregado en esta festividad, somos 4 barrios los que organizaron la fiesta y este año nos tocó a nosotros”, dijo Pilar Mantari, integrante de la junta directiva del barrio de Chilca.
La imagen fue llevada en procesión desde el convento de Santa Rosa de Ocopa hasta la iglesia del distrito. En las afueras del convento, había unos 3 vehículos nuevos que estaban con cintas de color y el tradicional champagne para la bendición.
“Pedimos a Santa Rosa que bendiga a nuestras familia, trajimos nuestros carros nuevos para pedirle trabajo y prosperidad”, dijo Elvis Muñóz, empresario de Concepción.Liz Velásquez, que llegó de Lima, también estaba muy contenta junto a su familia, y también llevó su miniván para que reciba la bendición.
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“Gracias a Dios y Santa Rosa por las bendiciones, estoy encantada de volver al pueblo y ver que todo está tan hermoso”, comentó Liz.
En las afueras del templo, y en las calles principales se realizó una feria gastronómica, donde se expendían carnero al palo, pachamancha, trucha a la parrilla, chicharrón colorado, entre otros platos típicos, los puestos lucían abarrotados por los comensales.
Los vehículos de servicio público fueron insuficientes para la cantidad de visitantes que luego de la fiesta querían retornar a Huancayo, muchos esperaron hasta una hora para conseguir la movilidad y el pasaje había subido hasta 5 soles, lo cual generó el reclamo de las familias que eran numerosas.