Fueron a recuperar el cadáver de un pescador que murió ahogado en la laguna Huascacocha, en la parte occidental de la provincia de Yauli La Oroya y se toparon con otro caso. Presuntos abigeos entraron a robar una estancia y uno de ellos murió baleado.
La mañana de ayer, policías de la comisaría de Morococha primero llegaron al humedal para recoger el cuerpo de Pablo Malpartida, quien según las investigaciones, estaba pescando usando como bote una cámara de jebe, pero fortuitamente cayó y pereció ahogado.
Cómplices huyen dejando el cuerpo de su compañero
Luego de esta diligencia, los efectivos conocieron que cuatro delincuentes irrumpieron en la estancia de Racrachuy del anexo Chuquiquirpay (distrito Santa Bárbara de Carhuacayán). Los presuntos abigeos amenazaron a una mujer que vivía con sus seis hijos, para robar el ganado. Los ladrones armados forcejearon con uno de los pastores de la estancia y a uno se le escapó un disparo. Fortuitamente la bala impactó en el cuerpo de uno de los maleantes, que murió en contados segundos.
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Los facinerosos huyeron sin consumar su fechoría. Aún se desconoce la identidad de la víctima de unos 40 años, que tiene puesto un pasamontañas. Sus cómplices huyeron de la escena, abandonando el cuerpo de su cómplice. Con dos cadáveres a cuestas, las autoridades dispusieron su traslado a Carhuacayán para luego ser llevados a La Oroya. La Fiscalía y PNP investigan el confuso incidente.