Triste final. Antes de salir de su casa en Ocopilla para dirigirse a la escuela 30012 , Benjamín S.V. (11), se despidió de Ana Villanueva, con muchos besos. “Te quiero mucho mamá”, le dijo, sin imaginar que sería la última vez que besaría a su madre.
El pequeño llegó a su plantel muy temprano y vio que un compañero tenía una bicicleta y salió a dar una vuelta.
A las 12:30 de la tarde de ayer, cuando el pequeño estaba en las calles Santa Rosa y La Mar de Chilca, dos perros lo persiguieron. En su afán de huir de los canes bravos, no vio a la cúster de la empresa “Petra” que lo embistió.
Tras el violento impacto, Benjamín murió en forma instantánea; su mochila negra y gorra, quedaron tiradas en el asfalto que quedó manchado con la sangre del pequeño.
Llanto y dolor
En medio de los gritos de los testigos y la desesperación de los pasajeros del vehículo AIJ-711 de servicio público, trataron de socorrer al menor. Policías y serenos de Chilca llegaron al lugar y confirmaron su deceso.
El chofer de la cúster, Anderson Luza Campos (20), fue detenido por el presunto delito de homicidio culposo.
Acongojados, testigos contaron que el escolar huía de dos perros e ingresó al carril del vehículo Petra que lo impactó y arrastró unos metros. “Quién me va devolver a mi hijo. Era muy noble, cariñoso, estudioso. ¿Por qué Dios mío, por qué a mi hijo? Ayúdenme, por favor” exclamaba Ana Villanueva. Se enteró que su engreído fue atropellado cuando vendía sus aguas de hierbas en el mercado. Cualquier ayuda al yape 33336793.