El litoral chinchano desde el miércoles se encuentra con oleaje anómalo. Ante la evidente situación de peligro las embarcaciones están fondeadas y el ingreso turístico al primer puerto de la provincia se encuentra cerrado, hasta nueva disposición de la Dirección de Hidrografía y Navegación de la Marina de Guerra del Perú.
Omar Mendoza, pescador de Tambo de Mora, precisó que el mar en la madrugada golpea con mayor intensidad la estructura del Muelle Nuevo. El oleaje llega a sobrepasar la zona que se utiliza para el embarque y desembarque de los hombres que se dedican a la pesca. El agua -indica- llega a alcanzar la plataforma de uso peatonal.
Debido a estas condiciones del litoral no ha quedado más opción para los pescadores que llevar sus embarcaciones lejos de la orilla en donde permanecen ancladas. Amado Espinoza, dedicado a la actividad marítima, dijo que se espera que el oleaje baje la intensidad para abastecer de alimentos y combustible a quienes se han quedado a cargo de los barcos.
De momento, se restringe el ingreso del público al puerto de Tambo de Mora para fines recreativos y con relación a las playas, el personal de salvataje permanece orientando a los visitantes sobre las precauciones que deben de tener al momento de ingresar a bañarse. No obstante, son pocas las personas que eligen nadar bajo las condiciones marítimas.