En solo dos semanas el nivel de contagio por coronavirus duplicó la cantidad que se tenía registrada en el mes de junio. Para el director de la Unidad Ejecutora 401 – Salud Chincha, Víctor Donayre Morón, este es un indicador de que la curva esta en “ascenso” a nivel de la provincia y por tanto se debe de mantener las medidas de bioseguridad para mitigar el riesgo de infección.
De acuerdo con la data en el mes anterior hubo un total de 34 personas con diagnóstico de COVID– 19. Es decir que por día había más de un infectado. Y para julio la estadística sufrió un cambio preocupante. Hasta la quincena se tenía al menos 61 chinchanos que habían dado positivo al tamizaje y es posible que los números sigan en crecimiento en esta cuarta ola de la pandemia.
No obstante, y según manifestó Donayre se tratan de contagiados que no requieren cama hospitalaria y están en cuarentena en sus viviendas. Agregó que la mayoría de ellos -en su momento- aceptaron recibir la vacuna contra esta enfermedad.
Sin embargo, no todos cumplen con las recomendaciones médicas, ya que, en las visitas de los profesionales de la salud se evidenció que hay algunos que no están en aislamiento. Es decir, continúan con sus actividades y podrían estar llevando el contagio a otras familias, en donde es posible que existan personas no vacunadas.