La Libertad: Uso de la mascarilla divide a la población

“El virus está en todo el ambiente y debemos aprender a convivir con él”, dice Ever Torres, a la altura de la cuadra dos de la avenida Víctor Larco Herrera en Trujillo. Él no lleva mascarilla y su pareja la tiene puesta, pero debajo de la nariz. “Es innecesario llevarla”, añade Lucía Morán.

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Medidas

En Lima Metropolitana, Lima Provincias, Callao, Ica y Áncash el uso de la mascarilla al aire libre para evitar el contagio de la Covid-19 dejó de ser obligatorio desde el último 1 de mayo.

De acuerdo con el Decreto Supremo Nº 041-2022-PCM, para que esta medida se haga efectiva las regiones deben tener el 80% de cobertura de inmunización con las tres dosis en mayores de 60 años y el 80 % con dos dosis en personas de 12 años a más.

En La Libertad, según el Repositorio Único Nacional de Información en Salud (Reunis), entidad adscrita al Ministerio de Salud (Minsa), para que todos los mayores de 60 años tengan las tres dosis falta un 3.1%, pues de la población objetivo que posee, 279,440, han acudido a los vacunatorios por tercera vez 215,003.

En cuanto al avance de la vacunación en personas de 12 años a más con dos dosis, es de 89.1%, por lo que este requisito ya estaría cumplido.

“Mucha gente ahora usa la mascarilla por cumplir. Yo me la pongo, pero en espacios cerrados. Hoy estoy caminando y no creo conveniente ponérmela porque me encuentro al aire libre, en la calle”, agrega Ever Torres, a quien el virus lo atacó hasta en dos oportunidades.

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Posiciones

Correo recorrió el Centro Histórico y algunas otras calles de la ciudad para conocer la opinión de la población respecto al Decreto Supremo que hace voluntario el uso del barbijo en ciertas regiones del país y que pronto podría entrar en vigencia en La Libertad debido al avance en el proceso de inoculación.

También en la avenida Larco, Maricruz Apaza confesó sentirse “cansada” de la mascarilla. “Sufro de problemas respiratorios y cuando camino con ella, me falta el aire y al no poder respirar bien me duele la cabeza”, contó.

A pocas cuadras de la avenida España, Luis Eduardo Huamaní Chávez llevaba la careta debajo de la nariz y aunque cuando lo abordamos se la acomodó, dijo de manera tajante que “ya no debería usarse en lugares públicos”.

“Ya no debería ser obligatorio su uso, pues la cifra de casos y muertes por Covid-19 ha bajado considerablemente en la región, en el Perú y muchos otros países del mundo”, comentó.

Para Luis, haber usado el barbijo durante dos años consecutivos le ha “afectado”. “Trabajar así ya no es cómodo, cansa. Hay personas a las que incluso les ha brotado algunos granitos o les ha afectado la piel”, sostuvo.

En la Plaza de la Armas de la ciudad, sentado sobre una banca y la mascarilla bien puesta, Rodolfo Ríos subraya que “aún hay que cuidarse mucho del virus que contagia la Covid-19″.

“Todavía debemos ponernos la mascarilla. Yo ahora hablo con usted, que tiene mascarilla, pero no sé si tiene sus tres vacunas o está con la enfermedad”, sustentó.

En el jirón Almagro, Alex Muñoz Ríos tampoco duda y enfatiza que él seguirá usando el barbijo. “Es importante usarlo. ¡Qué pasa si me lo saco y me contagio”, dijo.

“Cansa usarla –la mascarilla–, pero dejar que sea voluntario su uso no me parece adecuado, pues hay mucha gente que tose y no tiene cuidado”, opinó María Olórtegui.

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Enfático

El Colegio Médico del Perú - Consejo Regional I La Libertad ha sido claro en cuanto al uso voluntario o no del barbijo en espacios abiertos.

Su decana, Elena Ríos de Edwards, ha reiterado que para que deje de usarse, es necesario que por lo menos el 80% de la población de 60 años a más tenga las tres dosis.

“Cuanto más nos cuidemos, mejor”, expresó la galena días atrás.

Ríos agregó que uso del barbijo también es importante para evitar el contagio de la influenza, enfermedad que, como la Covid-19, se puede trasmitir a través de la tos.

“La influenza afecta a todas las personas, pero principalmente a los niños, así que es mejor seguir protegiéndonos mientras se sigue el proceso de vacunación”, dijo.