Trujillo y el sabor del pollo a la brasa (VIDEO)

Su majestad, el pollo a la brasa, es uno de los platos típicos y más populares de la gastronomía peruana. Tiene su origen hace más de sesenta años en el Perú.

Hablar de las primeras pollerías en la ciudad de Trujillo es referirse a “Kikiriki”, local que abrió sus puertas hace más de 50 años y que hoy sigue gozando de la aceptación del público.

Historia

Según Juan Carlos Castro Quiroz (41), subgerente de la empresa y dedicado al área operativa, la primera pollería se abrió en 1970 en la ciudad de Cajamarca. Llevaba el nombre que hoy conocemos. Debido al éxito del negocio, el segundo local se abrió en Chimbote, para luego pasar a la ciudad de Trujillo.

Operaciones. Instalarse en la avenida España no fue solo casualidad. En aquellos años era la zona comercial de la ciudad por la presencia de la exestación del ferrocarril. Para controlar el negocio desde la cuadra 19 hasta la 23 de la avenida España, nace la pollería Wilson, ubicada ahora frente al local de la Asociación de Pequeños Industriales y Artesanos de Trujillo (Apiat).

Venta

En aquellos años, sus principales competencias eran la Pollería ABC y Pollos Bolívar. “Empezamos en un local pequeño, recuerdo que poníamos en la puerta una barra para evitar los robos”, recuerda Juan Carlos.

La venta del pollo a la brasa también ha cambiado, con la llegada de negocios similares a la ciudad. En los primeros años se vendían en promedio 400 pollos diarios, mientras que en fechas festivas este se incrementaba hasta los 1,500 pollos.

Ahora se venden 200 pollos diarios, siendo el inicio de semana (lunes), el día más bajo. Según Juan Carlos, durante el año la temporada más baja es la escolar y semana santa.

Competencia

Otra de las grandes amenazas que han tenido los negocios locales son la llegada de las cadenas de pollerías y los grandes centros comerciales.

“Como toda empresa teníamos un poco de miedo; sin embargo, nos habrán bajado 10 pollos y hasta el día de hoy seguimos”, sostiene Juan Carlos, quien es uno de los pocos empresarios que puede ufanarse de haber conquistado el exigente paladar de los trujillanos. Así lo ratifican sus 3 locales ubicados en Trujillo (Wilson I y II, y Kikiriki) y próximamente dos locales en Chimbote.

Servicios

Uno de los valores que tiene su empresa es no restringir las cremas a sus clientes, servir una buena porción de papas fritas y ensalada extra, cuando el cliente lo solicita.

Juan Carlos nos cuenta que el público trujillano prefiere el ají escabeche para acompañar su pollo a la brasa.

Han buscando ofrecer otros productos como el arroz chaufa, pero la exigencia de sus consumidores siempre serán las papa fritas.

Preparación

El exigente paladar de los trujillanos ha variado con el pasar de los años y también la preparación de la tradicional ave. En la pollería Kikiriki han apostado por ofrecer una fusión de sabores manteniendo de cierta manera los ingredientes tradicionales (criollo) y parte del sabor oriental.

“Ahora hay más ingredientes, ha entrado más productos del extranjero y con el tiempo se ha modificado la preparación. El sabor de las pollerías ha evolucionado (…) El sabor acriollado lleva ingredientes tradicionales, nosotros nos hemos ido por el sabor oriental”, agrega Juan Carlos.